sábado, 30 de junio de 2012

La derecha aprende pronto

La derecha latinoamericana, las clases y grupos sociales que la componen y sus aliados internacionales, tienen un amplio bagaje de ejercicio del poder y saben aprovecharlo con ductilidad, adaptándolo al tono que le marquen los tiempos. Han sufrido derrotas pero aún son fuertes.

Rafael Cuevas Molina/Presidente AUNA-Costa Rica

La derecha aprendió de sus derrotas y aplica
nuevas estrategias golpistas y antidemocráticas.
Los golpes de Estado en Honduras y Paraguay dejan muchas lecciones para comprender cómo se mueve la derecha latinoamericana en nuestros días pero, seguramente, una de las enseñanzas más claras que nos dejan es que la derecha aprende pronto; es decir, no se queda pasmada cuando sufre algún revés, sino que encuentra la forma de volver a hacer lo mismo de siempre pero, ahora, acorde con el nuevo espíritu de los tiempos.

Habiendo sido para ella exitoso el golpe de Estado en Honduras, no dudó un instante en aplicarlo en Paraguay. Sabe que inicialmente se le viene encima un vendaval, pero que con el tiempo se atempera hasta diluirse, pues existe una institucionalidad continental que, mal que bien, le sigue siendo proclive aunque haya voces discordantes que expresan su rechazo y condena.

Ha aprendido, también, a utilizar otras herramientas que antes eran prácticamente patrimonio de la izquierda. Es el caso de las organizaciones no gubernamentales, algunas de las cuales se han transformado en verdaderos puestos de avanzada de la reacción latinoamericana. Financiadas desde Estados Unidos y Europa, tienen una agenda a la carta para cada país, saben identificar fisuras, contradicciones y debilidades, y se insertan hábilmente con reivindicaciones y reclamos  que levantan simpatías y muchas veces dividen y enfrentan entre sí al movimiento popular.

Las Cumbres de Mendoza

Los gobiernos de América del Sur, reunidos en la ciudad de Mendoza, Argentina, respondieron políticamente al golpe de Estado en Paraguay: más unidad, más integración, más democracia y ninguna tolerancia para los golpistas, es el mensaje que envían gobiernos y movimientos sociales desde el MERCOSUR y UNASUR.

Roberto Utrero / Especial para Con Nuestra América
Desde Mendoza, Argentina

La presidenta argentina, Cristina Fernández, presidió
la cumbre del MERCOSUR y anunció el ingreso de
Venezuela a este organismo de integración regional.
Las Cumbres de Mendoza podrían hacer alusión con justicia a las de los cerros más elevados de América que están en esta provincia, desde el Aconcagua al Tupungato. Pero en este momento histórico no es así; en la ciudad más importante del oeste argentino, con sus cuatros siglos de existencia y cuna del Ejército de Los Andes, desde donde partió hace casi doscientos años el General San Martín en su campaña libertadora, se llevó a cabo en estos días un acontecimiento regional similar que remembró aquella gesta. Se realizaron las Cumbre del MERCOSUR, la Social del mismo organismo y, en la emergencia golpista sufrida por el país hermano Paraguay, la de UNASUR.

Circunstancias por demás aciagas, con una pátina de legitimidad, que llevaron al grave desenlace de la caída del presidente Fernando Lugo, cuya responsabilidad radica en los sectores tradicionales del poder: las rancias oligarquías con sus políticos de turno, el alto clero de la Iglesia, opuesto a Lugo y los militares que siempre han sido permeables a la presión del Imperio.

Educar para una nueva cultura ambiental en nuestra América

Para atender las causas y consecuencias de la actual problemática ambiental, económica y social latinoamericana y caribeña, no bastan solo las políticas públicas o los acuerdos de intención, siempre coyunturales y sujetos a los vaivenes propios de la política: se requieren transformaciones mucho más profundas y duraderas, en el ámbito de la cultura.

Andrés Mora Ramírez / AUNA-Costa Rica

Río+20: la visión dominante del desarrollo
 se impuso al final de la cumbre.
Si algo quedó claro tras la frustrada Cumbre de Río+20, es que los acuerdos mundiales que la humanidad requiere para enfrentar los problemas asociados al cambio climático y  la actual crisis sistémica no vendrán de los gobiernos ni de las elites políticas, quienes en medio de contradicciones y la defensa de sus propios intereses, todavían parecen estar mucho más preocupados por el verde de los dólares que por la sostenibilidad de la vida en el planeta.

El excanciller ecuatorioano Fander Falconí, fue contundente en su balance de la Cumbre: “No nos engañemos: en Río+20 hubo escasos avances en las cuestiones ambientales. No hubo ninguna contribución del Norte en favor de una “prosperidad sin crecimiento económico” (parafraseando el título del libro de Tim Jackson). Hubo una visión dominante. La que tienen los grandes países desarrollados, responsables, en gran medida, de la contaminación del mundo —por causa de sus altos consumos de energía y materiales—.  Ellos viven un momento en que la crisis que sufren solo podrá ser paliada si la endosan a los países de la periferia, mal llamados en vías de desarrollo” (El Telégrafo, 27-06-2012).

México en la encrucijada

México se encuentra en estos días en una encrucijada.  Este domingo se decidirá si se continúa con el modelo neoliberal que han propugnado el PRI y el PAN en los últimos 30 años o si eligiendo a Andrés Manuel López Obrador se opta por un cambio sustancial en la política económica.

Carlos Figueroa Ibarra / Especial para Con Nuestra América
Desde Puebla, México

El próximo domingo 1 de julio México vivirá un proceso electoral que se  antoja como la segunda parte del vivido en julio de 2006. En aquella oportunidad como es sabido, una elección disputada y de muy mala calidad, para decir lo menos, acordó darle el triunfo a Felipe Calderón con una diferencia de 0.5% de los votos. El olor a fraude embargó al país y a diferencia de lo que se hizo en Costa Rica en ese mismo 2006, el establishment mexicano se negó a hacer un recuento electoral del conjunto de los votos y de las casillas.

En este 2012, el candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto, tiene  mucho a su favor. En primer lugar el apoyo de la gran cúspide empresarial:  más de las dos terceras partes de las 500 empresas más importantes  de México lo consideran el ganador. Además, la labor desinformadora y manipuladora del duopolio televisivo (Televisa y TVAzteca) que se ha reflejado en una multimillonaria campaña de imagen a favor del candidato priísta. Y en la reiteración por radio y televisión de que Peña Nieto está arriba de Andrés Manuel López Obrador en las encuestas  por un margen de entre 12 y casi 20%. Cabe agregar también la  poderosa maquinaria electoral del PRI: el domingo  1 de julio esa maquinaria  organizará una  de las formas de fraude llamada en México “Operación Carrusel”.

México: Un punto de encuentro y dos destinos

La disyuntiva de 2012 es restauración o relanzamiento del cambio político para no posponer más la agenda que México tiene pendiente consigo mismo y que se refiere a la justicia, la social y la formal, prerrequisito para consolidar a la democracia.

Lorenzo Meyer / El Siglo de Torreón

Andrés Manuel López Obrador a su llegada a la Plaza
de la Constitución, para el acto de cierre de campaña.
La Gran Decisión. La elección presidencial de 2012 es el punto de encuentro y choque de dos propuestas lo bastante disímiles como para hacer que el futuro político de México sea significativamente diferente según se elija una u otra. Una es de izquierda y la otra de derecha -ambas moderadas. Lo históricamente significativo es que si se impone la derecha volvería a "Los Pinos" el partido autoritario más exitoso del siglo XX: el PRI. Si, por el contrario, ganara la izquierda, se abriría la posibilidad de proceder a una alteración de prioridades cuyo referente más cercano sería el cambio que se inició hace 77 años, cuando el presidente Lázaro Cárdenas reencauzó al país.

Los líderes de la alternativa son Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y Enrique Peña Nieto (EPN). Es verdad que también estará en las boletas otra opción de derecha, la que encabeza la panista Josefina Vázquez Mota, pero todo apunta a que su propuesta nunca tuvo realmente la oportunidad de superar a la de EPN. Esas dos visiones opuestas de México -de su pasado, presente y futuro- se disputan el apoyo de casi 80 millones de votantes, pero ni de lejos en condiciones de igualdad.

Paraguay, enseñanzas de futuro

Ahora, en Paraguay, colorados y liberales, opositores durante la dictadura de Stroessner, son aliados para dar un zarpazo a la democracia.

Sergio Rodríguez Gelfenstein / Especial para Con Nuestra América
Desde Caracas, Venezuela

La sombra del dictador Stroessner
campea en Paraguay
Aunque lo ocurrido en Paraguay no es técnicamente un golpe de estado, eso poco importa en términos políticos, porque el hecho cierto es que se produjo un “quiebre institucional democrático” y la destitución ilegítima del presidente Fernando Lugo. Sin embargo, esta definición tiene implicaciones trascendentales para la estabilidad de nuestros sistemas democráticos permanentemente torpedeados desde el imperio

La destitución de Lugo se hizo en el marco de una ley, según dijo él mismo al aceptar el veredicto, pero fue una decisión ilegítima. Por ello, las preguntas valederas deberían estar encaminadas a saber de qué legalidad hablamos y cuál es la calidad de nuestras democracias.

Paraguay: “No hay fuerza social para frenar a la derecha”

Periodista y educador popular, Raúl Zibechi es columnista del periódico mexicano «La Jornada», al tiempo que acompaña a movimientos sociales. «Territorios en Resistencia» y «Política y Miseria» son, además, sus dos últimos libros publicados en el Estado español. En la entrevista concedida a GARA, analiza los entresijos de la destitución del presidente paraguayo, Fernando Lugo, y sus repercusiones. 

AinaraLertxundi / GARA (EuskalHerria)

¿Qué factores han propiciado la destitución de Lugo?

El periodista uruguayo Raúl Zibechi.
El Gobierno de Lugo siempre tuvo una enorme debilidad institucional. En el Parlamento apenas contaba con un par de diputados de entre 90 y otro par de senadores de 45, los demás pertenecen a su aliado principal, el Partido Liberal Radical Auténtico, un partido de derecha moderada que no llegaba al Gobierno desde hacía 70 años y que apoyó a Lugo por su enorme popularidad. Y al Partido Colorado y a otros más pequeños, pero todos de derecha. A su vez, en el aparato estatal, en la Justicia, en los diversos servicios y, por supuesto, en las Fuerzas Armadas y policiales, el peso del Partido Colorado, que gobernó Paraguay durante 60 años, es abrumador. En sus casi cuatro años como presidente, Lugo no desmontó esta presencia colorada que se apoya a su vez en mafias tradicionales y en nuevas mafias vinculadas al narcotráfico. La mayor parte de su gabinete eran liberales que no son muy diferentes a los colorados que toleraron a Lugo hasta que vieron que podían perder las elecciones a realizarse en apenas nueve meses y decidieron apartarlo.

Otro golpe de Estado en América Latina

Paraguay y Honduras se diferencian radicalmente de los casos de Venezuela, Bolivia y Ecuador que también fueron objeto de golpes planeados en EEUU. Los cinco países tenían en común que sus gobiernos progresistas no tenían raíces en organizaciones con largas trayectorias. Sin embargo, los tres últimos movilizaron con rapidez el apoyo popular que les permitió dar el contra-golpe en el momento necesario.

Marco A. Gandásegui, hijo. / ALAI

La oligarquía contraataca en Paraguay y en América Latina (ilustración de El Telegrafo, de Ecuador)
El golpe de Estado ejecutado por la derecha terrateniente del Paraguay contra el presidente Lugo dejó las mismas huellas que el derrocamiento en 2009 del presidente Zelaya en Honduras. Por un lado, el rastro de sendas oligarquías que gobernaron a través de dictaduras militares por gran parte del siglo XX. Por el otro, las heridas de la intromisión abierta por parte de EEUU que llevó de la mano a los militares criollos para que respaldaran las acciones de una oligarquía golpista. Incluso, la trama norteamericana fue realizada en alianza con los partidos liberales tradicionales de ambos países. Una coincidencia que refleja la frágil constitución política de los dos países.

En Paraguay la oligarquía terrateniente trabaja en estrecha relación con el gran capital agrario brasileño que experimenta uno de sus auges económicos más espectaculares de su historia. Incluso, uno de las causas por las cuales fue procesado en forma sumaria el presidente Lugo fue por las protestas de los campesinos que están siendo despojados de sus tierras por capitalistas agrarios brasileños que operan en Paraguay. En Honduras, pasó algo similar.

Golpe tras golpe: una cronología necesaria

Estos intentos y golpes de Estado en América Latina, parecen ser un ciclo que se repite constantemente y que se reinicia en los lugares donde no se tuvo éxito; en este sentido, Venezuela tiene que estar alerta ante una nueva arremetida golpista, que tiene varias posibles alternativas, algunas ya ensayadas y otras nuevas. 

José Amesty / Especial para Con Nuestra América
Desde Caracas, Venezuela

Una historia de "golpes" en América Latina.
Luego del Golpe de Estado en Venezuela, el 11 de abril 2002, se han venido sucediendo una serie de Intentos y Golpes de Estado en América Latina, veamos una cronología de ellos:

*Golpe Mediático, Empresarial y Militar. El 11 de abril de 2002 se sucedió un Golpe de Estado contra el Presidente Constitucional de Venezuela, Hugo Chávez, enmarcado en fuertes protestas y una huelga general convocada por Fedecámaras; el mando de la oposición convocó a una marcha permisada que luego fue desviada hacia el Palacio de Gobierno en Miraflores. Alrededor del mismo se habían congregado simpatizantes de Hugo Chávez, y se produjeron enfrentamientos que causaron varios muertos en ambos bandos. En la madrugada del día siguiente el Alto Mando Militar venezolano anunció que Chávez había renunciado tras habérselo solicitado. Inmediatamente, militares adversos a Hugo Chávez ejecutaron un Golpe de Estado que colocó en la Presidencia al presidente de Fedecámaras, Pedro Carmona Estanga. Luego de fuertes protestas de los simpatizantes de Chávez y algunas presiones internacionales, los militares leales al Gobierno retomaron el poder y Chávez reasumió la Presidencia en la madrugada del 14 de abril de 2002.

Reimpulso (neo)liberal en América Latina

La conformación de la Alianza del Pacífico (re)incorpora a México, aliado incondicional de los EE.UU., al debate latinoamericano. Este espacio tiene la envergadura económica, demográfica y política para contrapesar el liderazgo brasilero (y del MERCOSUR) y ensayar una estrategia de aislamiento/hostigamiento hacia el ALBA que seguramente se pondrá en marcha más temprano que tarde.

Ignacio Kostzer / Marcha (Argentina)

Los presidentes Juan Manuel Santos, Sebastián Piñera, Felipe Calderón y Ollanta Humala
en la cumbre de creación de la Alianza del Pacífico, en la región de Atacama, Chile.
En estos días se ha conocido la constitución de la “Alianza del Pacífico”, espacio de integración conformado por Chile, Perú, Colombia y México. Si quedaba alguna duda sobre el giro de 180 grados que ha dado el Presidente peruano Ollanta Humala desde que asumiera el año pasado, el apoyo a esta iniciativa nacida del gobierno de Alan García termina de eliminar la incertidumbre. A esto hay que sumarle las 12 muertes en conflictos sociales como resultado de la represión en tan solo 10 meses y un rumbo general del gobierno que ha puesto a la derecha conservadora peruana como su principal sustento en el poder (ver “La encrucijada peruana” de RaulZibechi).

La aparición de esta Alianza viene a terminar con un período de “repliegue táctico” de la política exterior de los gobiernos liberales en el continente. Tras la caída del ALCA en la Cumbre de las Américas del año 2005, asistimos a un contexto regional donde la iniciativa política ha estado fundamentalmente del lado de los gobiernos del MERCOSUR (sobre todo Brasil y Argentina) y del ALBA (especialmente Venezuela y Ecuador).

Honduras, entre la represión y la lucha

A tres años del golpe militar en Honduras, el nombramiento de Xiomara Castro, compañera de Zelaya, como candidata a las presidenciales de 2013 abre esperanzas en el país.

Inés Giménez Delgado / Diagonal (España)

Xiomara Castro, candidata del partido LIBRE, junto
a su esposo el expresidente Manuel Zelaya 

(fotografía tomada de www.observadorglobal.com)
Tegucigalpa. 25 de junio de 2009. El referéndum del día 28 sobre una cuarta urna causaba expectación, encono y renuncias. Era el primer paso para decidir si se convocaba a la Asamblea Nacional Constituyente para modificar la constitución de 1982. Esta consulta se sumaba a las reformas agrarias, salariales y culturales que había acometido el gobierno liberal de Zelaya.

A las seis de la mañana, un comando militar cercó el domicilio del presidente y lo llevó, secuestrado, fuera del país. Poco después, la Corte Suprema de Justicia avaló el golpe de Estado. La noticia se propagó rápidamente y de manera contradictoria en los informativos y en los vecindarios. El pueblo salió a la calle en masa. En las semanas siguientes se sucedieron las manifestaciones, los toques de queda y la represión, que comenzó siendo ruidosa para transformarse en esa tarántula que ataca selectivamente.

Medios alternativos comunitarios desde la noción de servicio público: entrevista a Marcelo Colussi

El analista argentino Marcelo Colussi expone en esta entrevista sus ideas sobre el sentido de una comunicación alternativa dentro del sistema: “decir otra cosa, llevar otro mensaje, mostrar la cara oculta de lo que dicen los medios funcionales al statu quo. Dado que la historia la escriben los que ganan, la cuentan según su proyecto hegemónico de dominación, los medios alternativos buscan contar la otra historia, la silenciada, la negada”.

Meriem Choukroun / Para Con Nuestra América

Marcelo Colussi, analista argentino radicado en Guatemala
Una temática tan difícil como la lucha de clases, porque de eso se trata, con especificidades y necesidades que posibiliten aminorar el poder monopólico más un crecimiento en democracia real. Un proyecto contra-hegemónico, o sencillamente un espacio nuevo en la comunicación social. Medios alternativos como servicio público que encuentran su poder en el hecho de que la verdad repetida mil veces termina siendo una verdad, parafraseando al revés una consigna abominable que aún rige en el mundo.

Una extensa charla con el compañero Marcelo Colussi, psicólogo y filósofo argentino radicado hace varios años en Guatemala, que escribe regularmente en varios medios electrónicos, nos permitió un abordaje esencial como para saber, por ejemplo, que en la lógica de la guerra “cobran cada vez más protagonismo las modernas tecnologías de la información y la comunicación como expresión de un mundo digital que abren las tecnologías de punta a nivel global. Son entonces guerras, fundamentalmente mediático-psicológicas. Y el objetivo bélico es la población en su conjunto, que recibe mensajes sin saber que está siendo sometida a una campaña perpetua de “bombardeo”.

martes, 26 de junio de 2012

ADHILAC rechaza el golpe de Estado en Paraguay

Declaracion de la Asociacion de Historiadores Latinoamericanos y del Caribe (ADHILAC)


La Asociación de Historiadores Latinoamericanos y del Caribe (ADHILAC) rechaza de manera enérgica el flagrante golpe de Estado perpetrado contra la autodeterminación del pueblo paraguayo y sus derechos democráticos mediante la destitución legislativa del Presidente Constitucional de Paraguay Fernando Lugo. 

La ADHILAC, que a fines del año pasado pudo realizar en Asunción, con absoluta libertad académica, un importante congreso internacional con la participación de decenas de historiadores de 16 países, gracias a la cálida hospitalidad de las autoridades y el pueblo paraguayos, reclama el restablecimiento pleno en la antigua tierra guaraní de la libertad, soberanía, democracia, autodeterminación y justicia por la que lucharon los padres fundadores de Nuestra América y que hoy han sido conculcadas en esa nación con la destitución de su legítimo primer mandatario. 

La ADHILAC expresa con toda fuerza su condena al alevoso quiebre del orden constitucional en Paraguay que viola la decisión popular expresada en las urnas y reclama el restablecimiento del sistema democrático, porque tal como lo señalara el propio mandatario de Paraguay ilegalmente depuesto: “Aquí no hay destitución del Presidente Lugo, hay destitución de la democracia”.

25 de junio de 2012 

lunes, 25 de junio de 2012

AUNA-Costa Rica condena el golpe de Estado en Paraguay


La Asociación por la Unidad de Nuestra América (AUNA-Costa Rica), ante los acontecimientos del hermano país del Paraguay, en el que el Congreso y el Senado destituyeron al presidente constitucional democráticamente electo, Fernando Lugo, de forma irregular, conformando una situación que puede catalogarse como golpe de Estado, comunica:

1) Su condena al gope de Estado perpetrado el pasado viernes 22 de junio.

2)Su denuncia que tales acontecimientos: a) se encuentran motivados por intereses económicos de los tradicionales sectores dominantes paraguayos y de las grandes transnacionales, especialmente de la Monsanto, interesada en extender sus negocios agrícolas en el país; b) rompen con la institucionalidad democrática e irrespertan la voluntad soberana del pueblo paraguayo.

3) Su solidaridad con el pueblo paraguayo y con Fernando Lugo, a quien considera presidente legítimo de todos los paraguayos y paraguayas en estos momentos de apremio.

San José, Costa Rica, 25 de junio de 2012.

sábado, 23 de junio de 2012

Paraguay: ¿otra Honduras?

Paso a paso, utilizando todo todos los métodos que están a su alcance mientras se llenan la boca con palabras altisonantes pero huecas de defensa de la democracia, la derecha latinoamericana intenta recuperar posiciones en cualquier lugar en donde vea un flanco débil o desguarnecido. El golpe en Honduras, hace tres años, y ahora en Paraguay, así lo confirman.

Rafael Cuevas Molina/ Presidente AUNA-Costa Rica

Paraguay: un guión similar al de Honduras.
Desde hace tres años, con el golpe de Estado en Honduras, la derecha latinoamericana, en connivencia con los Estados Unidos de América, dio un paso al frente y pasó de la defensiva a la ofensiva.

En efecto, hasta los infaustos acontecimientos acaecidos en ese país centroamericano, las fuerzas progresistas del subcontinente avanzaban firmemente ganando posiciones, que se expresaban en la cada vez mayor simpatía que despertaba el ALBA y algunas de sus programas, proyectos e instituciones asociadas, como Petrocaribe. En esos años, Guatemala y Costa Rica, dos países con gobiernos que nadie podría tildar de izquierda, mostraban interés en el ingreso a esa última organización; se avecinaban las elecciones en El Salvador en donde el FMLN se perfilaba como el mejor posicionado para ganar, y había recién pasado la reunión de la OEA en donde el tema de Cuba y su expulsión de dicho organismo había dado un vuelco espectacular, inconcebible en otras circunstancias que no fueran las que en ese momento se vivían.

El golpe hondureño puso coto a ese proceso de avance y sacó de su apabullamiento a la derecha latinoamericana. Fue, además, un golpe sobre la mesa de los Estados Unidos de América, que mostraron cuan falaces eran las posiciones que especulaban sobre la pérdida de interés de la gran potencia del norte en esta parte del continente.

USAID y la intervención encubierta en América Latina

La guerra contra nuestra América, contra sus empeños de unidad, integración y emancipación, no se hace –todavía- con aviones, buques o marines en las fronteras y puertos: pero el caballo de Troya del intervencionismo estadounidense ya está dentro de nuestros países.

Andrés Mora Ramírez / AUNA-Costa Rica

Mark Feirstein, funcionario de USAID: la justicia boliviana
denunció sus actuaciones en la "guerra del gas" de 2003
Mark Feirstein, administrador adjunto de la Agencia para el Desarrollo Internacional de los Estados Unidos (USAID, por sus siglas en inglés), es un personaje representativo de una de las formas en que Estados Unidos intenta imponer su dominio en América Latina: con un oscuro expediente que incluye actividades antisandinistas en Nicaragua, a principios de la década de 1990, y de asesoría al presidente Gonzalo Sánchez de Losada -el gran privatizador neoliberal de Bolivia- en el año 2002, la justicia boliviana lo ha denunciado como “uno de los responsables intelectuales de la muerte de 67 personas, y las lesiones de unas 400, en su mayoría civiles, durante la denominada ‘Guerra del gas’, en octubre [del] 2003” (TeleSur, 19/06/2012).

Semejante historial avergonzaría a cualquier gobierno o agencia respetuosa de los Derechos Humanos, que aplique criterios éticos y de elemental decencia en la selección de sus funcionarios; y al menos, debería facilitar los procesos que conduzcan al esclarecimiento de los cargos que se le imputan a Feirstein. Pero no es el caso de la USAID. Ni tampoco del gobierno de los Estados Unidos.

Manual del golpe para Abya Yala

Mientras que en Oriente los golpes  cívico-militar son legitimados  desde  el  Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, en América Latina, los golpes, son legitimados y monitoreados por  grupos de poderes económico-financiero-mediáticos y religiosos como la Agencia del Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID) y la Fundación Nacional para la Democracia (NED). 

José Toledo Alcalde / Especial para Con Nuestra América

Federico Franco juró como "presidente" de Paraguay
apenas una hora después de la destitución de Lugo.
Los Coup d'État en América Latina forman parte de su frágil historia política. En la complejidad de sus ejecuciones, los elementos cívicos-militares actúan regionalmente  dependiendo de la naturaleza del golpe. Golpe de Palacio, golpe de estado constitucional, golpe militar, golpe cívico-militar, golpe de mercado. Son solo algunas definiciones que hacen énfasis al golpe como acto violento el cual tiene como objetivo desplazar mandatarios que no responden a las exigencias y necesidades de los denominados grupos de factos.

Revisemos algunas definiciones: el Diccionario ideológico de la lengua  española (1985) la define como: la “medida grave y violenta que toma uno de los poderes del Estado, usurpando las atribuciones de otro”. Para el diccionario de uso del español de María Moliner (1997) es la  “acción de apoderarse violenta e ilegalmente del gobierno de un país alguno de los poderes del mismo, por ejemplo, el ejército”. Espasa Calpe (2001) la define como la “usurpación ilegal y violenta del poder de una nación” y el Diccionario Anaya de  la Lengua sostiene que es la “usurpación del poder por parte de un grupo”.

Violeta Barrios y Josefina Vázquez: ¿una historia común?

Con Violeta Barrios, en la Nicaragua de los años 1990, y con Josefina Vázquez, en el México de la guerra contra el narcotráfico, estuvieron los nicaragüenses, y nosotros ahora, frente a políticas disfrazadas de inofensivas  “amas de casa”, pero rabiosamente  conservadoras y demagogas sobre sus verdaderas intenciones.

Hector Lerín Rueda* / Especial para Con Nuestra América
Desde Ciudad de México

Josefina Vázquez, candidata presidencial
del gobernante Partido Acción Nacional
Para quienes nos hemos dedicado al  estudio de América Latina desde la academia o la diplomacia, es casi axiomático reconocer que existe una línea histórica común que  la vertebra, la explica y le da proyección futura. Pero si bien esta línea histórica no es el tema de este artículo, sí permite, por ejemplo, analizar la colonia, la independencia, la dispersión del siglo XIX y la posterior consolidación de los estados latinoamericanos; los balbuceos del capitalismo atrasado y dependiente a inicios del siglo XX, para beneficio norteamericano; el impacto de hechos decisivos como la “crisis del 29” y las revoluciones mexicana, cubana y nicaragüense, etc.; que inauguraron la entrada de las masas campesinas y obreras en la lucha por su liberación y, además, tuvieron impacto mundial. Esta línea, reitero, permite analizar y comparar también, con razonable hondura, fenómenos sociales y políticos menores, tanto que, por ejemplo, algunos analistas llaman a la actual circunstancia violenta mexicana, una “colombianización”; quizás por la gran cantidad de políticos   implicados con el narcotráfico, como la familia del ex presidente Uribe.

Muchos analistas también efectúan comparaciones acerca de lo que México ha hecho mal y Brasil bien; aunque poco reconocen que se debe a la aplicación de políticas progresistas que tratan de ir al pueblo, no sólo hablar de él. Y para quienes han estudiado las  revoluciones cubana y  nicaragüense, descubren un eco lejano de la mexicana, con su orientación popular, nacionalista y antiimperialista. Pero siguiendo una línea de hechos sociales, digamos menores, nos propusimos analizar y comparar si en esta subregión existe el  precedente de una mujer que, como la candidata panista  Josefina Vásquez Mota, hubiera querido gobernar por sí misma, o por interpósitas personas, un país en las terribles condiciones de guerra civil, anomia  y crisis económica como las  que ahora vive nuestro pueblo.

Las izquierdas en Latinoamérica: necesidad de repensarlas

La izquierda necesita hacerse un replanteamiento en tanto expresión de un pensamiento alternativo al capitalismo, a la lógica del libre mercado, a la sociedad de clases -crítica que no significa el desechar los ideales de cambio luego del derrumbe del socialismo europeo sino su profundización a partir de las lecciones aprendidas-.

Marcelo Colussi / Especial para Con Nuestra América
Desde Ciudad de Guatemala

La región latinoamericana tiene características bastante peculiares en tanto bloque. Si bien hay diferencias, marcadas incluso, entre algunas zonas -el Cono Sur con Argentina, Chile y Uruguay es muy distinto a Centroamérica, por ejemplo; o sus países más industrializados, Brasil y México, difieren grandemente de las islas caribeñas-, en su composición hay más elementos estructurales en común que dispares.

Los rasgos comunes que unifican a toda la región son, al menos, dos: a) todos los países que la componen nacieron como Estado-nación modernos luego de tres siglos de dominación colonial europea; y b) todos se construyeron intengrando a los pueblos originarios en forma forzosa a esos nuevos Estados por parte de las elites criollas. Estas características marcan a fuego la historia y la dinámica actual del área.

En un sentido, toda la historia de Latinoamérica en sus ya más de cinco siglos como unidad político-social y cultural, es una historia de violencia, de profundas injusticias, de reacción y luchas populares. De las rebeliones indígenas a la actual propuesta del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América) como proyecto de integración no salvajemente capitalista, las fuerzas progresistas han jugado siempre un importante papel.

Se sigue armando el rompecabezas mundial

Nueva Delhi y Washington son importantes socios en el área de defensa, pero esta  relación es vista con mucha cautela por China, donde existe la percepción de que India está avanzando en la estrategia de Estados Unidos de limitar la influencia de Beijing en el escenario internacional. El ajedrez mundial en medio de la crisis.

Sergio Rodríguez Gelfenstein / Especial para Con Nuestra América
Desde Caracas, Venezuela

Los que crean que aún es posible reformular la OEA habrán tomado nota del interés que Estados Unidos tiene en ello. Al cónclave de Cochabamba enviaron a una funcionaria de tercer nivel para que se reuniera con los cancilleres  de América Latina y el Caribe.  En ese mismo momento, la señora Clinton trataba los problemas que verdaderamente le interesan: armar una estrategia global y contener a China y a Rusia

Para ello, la secretaria de Estado  realizó una visita en tres países del Cáucaso con la vista puesta en Rusia. Armenia, considerada la principal aliada del Kremlin en la región, fue la primera escala del viaje, para después entrevistarse con  el presidente de Azerbaiyán, tratando de ser un actor protagónico en el conflicto que ambos países tienen  desde 1988 por la soberanía del enclave de Nagorno Karabaj en una región de tradicional influencia de Rusia, donde, sin embargo este país ha fracasado en la búsqueda de un acuerdo de paz.

Grecia y la persistente crisis mundial

A diferencia de América Latina, en la cual la crisis del neoliberalismo ha ido generando gobiernos de izquierda (Venezuela, Ecuador, Bolivia) o de centro izquierda (El Salvador, Brasil, Uruguay, Paraguay y Argentina) y gobiernos de esta última tesitura que resultan  muy cuestionados (Nicaragua por ejemplo), en Europa el descontento de masas que ha generado el neoliberalismo y su fracaso no se ha traducido en fuerza electoral alternativa.

Carlos Figueroa Ibarra / Especial para Con Nuestra América
Desde Puebla, México

En julio de 2009, hace ya tres años, fui invitado por el flamante Instituto de Problemas Nacionales de la USAC, dirigido en aquel momento por mi buen amigo Adrián Zapata, a dictar una conferencia inaugural. Con dicha conferencia y un evento  protocolario realizado un día antes, el IPNUSAC  comenzó sus actividades las cuales continúa  hoy en día. Esa conferencia que versó sobre la crisis mundial  fue comentada, para honra mía,  por el distinguido economista Lizardo Sosa. Recuerdo muy bien que expresé lo que  desde el pensamiento crítico se decía en aquel entonces: que la crisis  se prolongaría durante varios años. Los epígonos del pensamiento neoliberal habían  pronosticado que  la crisis que había empezado en 2008  estaba empezando a resolverse por aquellos días.  No se necesitaba ser muy avezado en economía para percibir que esto no sería cierto. Bastaba saber que la gran crisis capitalista de 1873 se prolongó hasta 1896 y que la crisis de 1929 necesitó del macabro mercado de la segunda guerra mundial para poder resolverse en definitiva.

Las elecciones en Grecia y América Latina

La batalla en que está enfrascada Syriza  trasciende a Grecia e incluso a Europa, donde ya se ha convertido en un referente para la izquierda auténtica que renace en las luchas populares. Únicamente en América Latina hemos visto a pueblos casi enteros alzarse prolongadamente contra el neoliberalismo y convertirse en opciones de poder, como Syriza en Grecia.

Angel Guerra Cabrera / LA PUPILA INSOMNE

 Syriza, la fuerza política emergente en Grecia
Las elecciones del 17 de junio en Grecia no las decidió el pueblo, como se supone en democracia(¿?). Estaba en juego la aprobación o rechazo del Memorando, nombre dado popularmente al acuerdo firmado por el gobierno griego con la troika (Unión Europea-UE-, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional), a cambio de su “rescate” por estas instituciones. El Memorando se traduce en el robo descarado por la banca internacional, principalmente alemana,  de la riqueza creada por el pueblo griego en décadas.

Así que las instituciones europeas y el capital financiero lanzaron una campaña de terror que caló en una parte de la población y la inhibió de votar por el  antineoliberal Syriza, que rechaza radicalmente el Memorando. Si no ganaban los partidarios de “cumplir los compromisos” con la UE, decían, Grecia saldría del euro, volvería al dracma y retrocedería al paleolítico. Con ello consiguieron aumentar considerablemente la votación del derechista Nueva Democracia(ND) -servil defensor de los acuerdos-  respecto a las elecciones del 6 de  mayo, que pasó de 18.85 a 29.66 por ciento de los sufragios y terminó puntero. Pese a ello, Syriza  le pisó los talones al superar con 26.89 el  16.78 por ciento logrado entonces aunque no pudiera alzarse con la victoria como anunciaban varias encuestas e indicaba el humor social.

Panamá: La crisis política se agudiza

La agenda del presidente Martinelli, aunque él lo niega, es reelegirse en 2014. El rechazo ha sido contundente. No hay que olvidarse, sin embargo, que Martinelli aún controla la Corte Suprema de Justicia, la Asamblea Nacional y es comandante en jefe de la Fuerza Pública.

Marco A. Gandásegui, hijo. / ALAI

Pocas veces en el pasado político panameño se presenció algo similar a lo producido el lunes 18 y martes 19 de junio de la presente semana. El gobierno del presidente Ricardo Martinelli quedó totalmente aislado, con sus flancos políticos descubiertos y sin una base social sobre la cual descansar. El intentó del mandatario de burlarse de los panameños con proyectos de ley concebidos exclusivamente para asegurar su reelección en 2014 no pudieron ser debatidos en la Asamblea de Diputados. Ante la movilización de un pueblo enardecido, tuvo que suspender las sesiones extraordinarias que formaban parte de su estrategia para lograr sus fines tácticos.

Todos los sectores afectados por el desgobierno de Martinelli salieron a protestar ante el exabrupto de querer inflar la Corte Suprema de Justicia con magistrados afines y de embolsarse el Fondo Fiduciario que tiene más de 2 mil millones de dólares en su cuenta. Martinelli se ganó el rechazo de todos los sectores populares y, además, logró romper con sus aliados naturales que forman parte de los grandes intereses económicos del país. No es casual que después de las manifestaciones populares, Martinelli hiciera un llamado a “la paz y a la reflexión”. Anunció que llevaría sus propuestas al foro creado en torno a la Concertación Nacional hace varios años para su amplia discusión.  

Kintto Lucas: “Hay que consolidar a UNASUR como un bloque de interlocución mundial”

El exvicecanciller ecuatoriano analiza en esta entrevista el papel de UNASUR y la coyuntura de América Latina, en la que identifica como modelos en disputa: “Un modelo de desarrollo que es más soberano, más vinculado a la producción nacional, a cambiar la matriz productiva y dejar de ser sólo países primarios exportadores, con una visión desde el sur, desde nuestros países. Y hay otro modelo que apuesta al libre comercio mal entendido, donde quienes dirigen el mercado terminan siendo las grandes corporaciones, que apuesta a los tratados de comercio con las grandes potencias, que de alguna forma son tratados neocoloniales”.

Revista Digital Análisis 365 (Venezuela) /

El exvicecanciller ecuatoriano Kintto Lucas
América del Sur vive un momento histórico en términos de integración regional, capitalizada en la Unasur. Un bloque que más allá de las diferencias ideológicas o económicas de los países que la integran, ha logrado levantarse como espacio de acuerdos y entendimientos.

En conversación con análisis365, el ex vicecanciller de Ecuador, Kintto Lucas, habló sobre los alcances de esta integración de países del sur y los desafíos más urgentes para convertirse en un referente mundial. El diplomático evaluó también el rol de Unasur en los procesos electorales que se avecinan en la región y abogó, ante todo, por la integración de los pueblos a través de los movimientos sociales, campesinos e indígenas para el fortalecimiento y consolidación del bloque.

Ernesto Laclau: “Yo veo que no se puede privar a la gente de reelegir a alguien”

“Yo no veo que se pueda privar a la gente de reelegir a alguien si quiere hacerlo, esto es, ponerle una barrera institucional a la expresión de la voluntad popular. Si una cierta figura política tiene el apoyo de su partido y es votada mayoritariamente sería antidemocrático impedir que esa continuidad se diera”, afirma en esta entrevista el intelectual argentino.

Mercedes López San Miguel / Página12
Ernesto Laclau en Buenos Aires

Sentado a la mesa del bar de un hotel porteño, el teórico político argentino Ernesto Laclau se pone a explicar lapicera en mano la noción de signo de Saussure. Y es que en su teoría del discurso conviven elementos de la lingüística con la sociología y la ciencia política. El intelectual identificado con la corriente posestructuralista es profesor emérito de la Universidad Essex de Londres, donde vive desde 1969. Viene seguido a la Argentina a visitar a su familia –tiene tres hijos y cinco nietos– así como a presentar en distintas sedes académicas la revista Debates y Combates. Laclau señala que en Europa se mira cada vez más el modelo alternativo de gestión que se está aplicando en Argentina, Venezuela y Brasil –en comparación con la receta neoliberal que marca el ritmo del viejo continente–. Apunta que el proceso venezolano puede continuar más allá de la figura central de Hugo Chávez y califica de “payasada” el reférendum sobre la soberanía de las Malvinas.

–Partiendo de su concepto de “populismo” como aquella forma de construcción de lo político que interpela a los de abajo contra el orden tradicional existente, ¿es posible un proceso de cambio populista de derecha en nuestra región?

–Es improbable. La derecha en nuestra región presenta su discurso como un reforzamiento del statu quo del orden institucional existente. La derecha tuvo un discurso de ruptura del orden institucional durante las dictaduras militares, pero ahora eso se ha diluido como posibilidad. En Europa se da todo lo contrario: el populismo es de derecha. Pensemos en Marine Le Pen en Francia, ciertas corrientes neonazis que surgieron a la superficie en Grecia o movimientos de derecha en Suiza. Como la socialdemocracia y los partidos conservadores se han plegado al modelo neoliberal, entonces empieza a emerger la protesta social a dos niveles: una protesta globalmente de izquierda representada por los indignados y otra a nivel de la xenofobia, del odio al inmigrante, que es un fenómeno asociado con la derecha.