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sábado, 20 de noviembre de 2010

Pronunciamiento de AUNA-Costa Rica: Diálogo, cooperación y paz entre Costa Rica y Nicaragua


“Los pueblos han de tener una picota para quien les azuza a odios inútiles; y otra para quien no les dice a tiempo la verdad”. José Martí.
Frente al rumbo que ha tomado el conflicto entre los gobiernos de Costa Rica y Nicaragua con motivo de las disputas por el proyecto de dragado del Río San Juan, la Asociación por la Unidad de Nuestra América (AUNA-Costa Rica) manifiesta a la comunidad nacional e internacional lo siguiente:
1. Condenamos toda acción que, amparada en decisiones arbitrarias e intereses políticos, económicos o geoestratégicos, viole el Derecho Internacional que resguarda la soberanía territorial de los Estados.
2. Llamamos al retiro de toda fuerza militar o policial de isla Calero, con el fin de propiciar un ambiente de diálogo y entendimiento entre las partes, así como a detener toda acción que conlleve el deterioro del medio ambiente en la zona.
3. Rechazamos las corrientes de opinión y las campañas mediáticas que estimulan una peligrosa exaltación de sentimientos nacionalistas mal encauzados y discursos xenofóbicos, en los que se expresan prejuicios que aún permanecen arraigados en nuestras sociedad y lesionan gravemente la dignidad humana de los y las nicaragüenses y costarricenses.
4. Censuramos los intentos de manipulación, desinformación e instrumentalización de los pueblos, por parte de los gobiernos de cualquiera de los dos países, con el objeto de fortalecer sus respectivas posiciones políticas y favorecer los intereses particulares que subyacen al conflicto.
5. Reafirmamos nuestra opción por la búsqueda de soluciones políticas y diplomáticas a los conflictos y la convivencia pacífica entre los Estados, sobre la base de la igualdad soberana y el respeto mutuo.
Desde AUNA-Costa Rica, instamos a los gobiernos de Costa Rica y Nicaragua a respetar las resoluciones de los organismos internacionales antes los cuales, voluntariamente, han acudido para resolver un nuevo episodio de desencuentros políticos, diplomáticos, jurídicos y ambientales por el Río San Juan. Es urgente restablecer lo más pronto posible los términos y canales que permitan una adecuada y armoniosa relación entre los dos países, que permita trabajar por el bienestar real de sus sociedades.
Asimismo, hacemos un vehemente llamado a las organizaciones sociales y populares de Costa Rica y Nicaragua, y de toda nuestra América, para que dirijan sus esfuerzos a crear conciencia entre las y los ciudadanos, y de manera particular entre los gobernantes, sobre la necesidad de alcanzar una solución de diálogo, cooperación y paz entre dos pueblos hermanados por su historia y su cultura, y a quienes hoy algunos pretenden separar mediante el odio, la discriminación y la prolongación de una disputa absolutamente injustificada.
San José y Heredia, Costa Rica
20 de noviembre de 2010

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