Estamos en México en
las puertas de un enorme saqueo. Los grandes capitales extranjeros y locales
saquearán la principal fuente de ingresos del país –el petróleo-, y para hacerlo, la cúpula gobernante, la
derecha neoliberal en el Senado y en la Cámara de Diputados, se aprestan a
efectuar las medidas necesarias para saquear a la economía popular.
Carlos Figueroa Ibarra / Especial para Con Nuestra América
Desde Puebla, México
Hace unos días en
ocasión de una gira en Europa, el titular del ejecutivo en México, Enrique Peña
Nieto anunció que se haría la reforma legislativa necesaria para que la inversión privada
entrara en la empresa Petróleos Mexicanos (PEMEX). Es el anuncio del saqueo del
principal recurso natural de exportación que tiene dicho país. Es conocido el
adagio de que “el mejor negocio del mundo es el petróleo bien administrado y el
segundo mejor negocio del mundo es el petróleo mal administrado”. La renta
petrolera de cualquier país que tiene dicho recurso natural ha sido siempre un
jugoso botín codiciado por las grandes empresas transnacionales. El pretexto
que ha puesto la derecha neoliberal encabezada en México por el PRI y por el
PAN es que PEMEX no tiene los recursos suficientes para modernizar a la empresa
paraestatal a efecto de que efectúe la
producción diaria de barriles de crudo que se necesita. ¿Qué necesita quien? Lo que no dice
la derecha neoliberal es que la exigencia productiva no necesariamente viene de
las necesidades del desarrollo nacional, sino que tiene que ver con las
exigencias que están haciendo los Estados Unidos de América. Se trata de acabar con las reservas petroleras mexicanas en
función de los requerimientos estadounidenses y por medio de ello enriquecer a
todas las empresas transnacionales asociadas con capitales locales que se
apropiarían de este patrimonio nacional.
La producción petrolera
mexicana debe racionalizarse y no malbaratarse para el beneficio de los grandes
capitales locales y nacionales. Si hoy PEMEX no puede modernizarse es porque
aporta el 70% de sus ganancias en el gasto corriente del gobierno federal
mexicano, lo cual ascendió en 2012 a casi 77 mil millones de dólares. Solamente
un 20% aproximadamente se reinvierte en la producción petrolera mientras que el
restante 10% es el costo de producción. Y esto sucede porque el régimen
tributario mexicano solamente asciende al 10% del PIB en tanto que las grandes
cúspides empresariales evaden sistemáticamente el pago de impuestos. Si ahora
la renta petrolera se va a compartir con el capital privado, el erario mexicano
perderá una parte importante de su ingreso. La renta petrolera aporta el 40%
del presupuesto público mexicano. Habrá necesidad pues de buscar otras fuentes
de ingresos fiscales. Una de ellas estará en la reforma tributaria que el
gobierno priísta con el apoyo del PAN están fraguando. Y esta reforma
tributaria no será por supuesto una que grave el ingreso sino el consumo. Se
está planeando subir el Impuesto al Valor Agregado (IVA) que pagan los
consumidores del 16 al 19%, así como también gravar alimentos y medicinas hasta
ahora exentos de tal impuesto.
Así pues, estamos en
México en las puertas de un enorme saqueo. Los grandes capitales extranjeros y
locales saquearán la principal fuente de ingresos del país, y para hacerlo, la cúpula gobernante, la
derecha neoliberal en el Senado y en la Cámara de Diputados, se aprestan a
efectuar las medidas necesarias para saquear a la economía popular. Todo esto
con el beneplácito empresarial porque los impuestos al consumo no les afectan.
Será una versión más de una de las divisas favoritas del neoliberalismo:
privatizar las ganancias y socializar las pérdidas. Se privatizará una parte
importante de la renta petrolera y se socializará la pérdida del ingreso fiscal
que dicha privatización implicará. Hoy en México el 70% de los hogares padecen
algún grado de inseguridad alimentaria, lo que quiere decir que pasan hambre
(28 millones de personas). Cifras conservadoras nos hablan de 52 millones de
pobres. Y diariamente 30 mexicanos se mueren de desnutrición. Y el país tiene
tasas de crecimiento malas o mediocres.
He aquí pues otro ejemplo de la triste historia
neoliberal.
Este tipo de articulos son muy necesarios para que la gente que no tiene un conocimiento indispensable
ResponderEliminarsobre los recursos de su pais y que sus corruptos gobiernos ocultan.Felicitaciones y sigan adelante.Saludos.
Este tipo de articulos son muy necesarios para que la gente que no tiene un conocimiento indispensable
ResponderEliminarsobre los recursos de su pais y que sus corruptos gobiernos ocultan.Felicitaciones y sigan adelante.Saludos.