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sábado, 24 de febrero de 2018

Alan Gross y la broma de una dictadura llamada democracia

La creación de la fuerza especial en informática creada por los EEUU para ingresar a Cuba (Cuba Internet Task Force) encubre el detalle que se esconde detrás de las buenas intenciones de Washington en la Grande las Antillas: el fin de la neutralidad de internet y la perpetua dictadura del monopolio de las comunicaciones.

José Toledo Alcalde / Para Con Nuestra América

La tozudez cuando se convierte en virtud – y no signo de debilidad y  posibilidad de aprendizaje - no tiene límites. De igual forma cuando el desorden – sea cual fuere su raíz etiológica – se cronifica en el tiempo se declara una lamentable e irreversible metástasis. Repitiendo el mismo formato de injerencia política de años atrás, EEUU en el 2004 valiéndose de un seudo apoyo cibernético a la comunidad judía en Cuba infiltró en la Grande las Antillas al desestabilizador agente de inteligencia Alan Gross puesto en libertad en el 2014. Hoy el desorden – tozudo, séptico, incontrolable y creciente – de los EEUU insiste en violentar la soberanía de la Republica de Cuba so pretexto – una vez más - de apoyo cibernético para la población encubriendo subterráneamente la lógica corporativista del sistema de telecomunicación y la violación al derecho a la neutralidad de internet.

Atacando democracias acusadas de dictaduras. Para EEUU invertir en desestabilizar regímenes democráticos en América Latina y el Caribe, alternativos al caduco plan hegemónico de Washington es cada segundo de vital importancia. Más de US$ 1000 millones de dólares son distribuidos – por Washington - por medio de esferas desestabilizadoras como USAID (Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional). Entidad paraestatal encarnada en el corazón de la toma de decisiones de gobiernos como  Haití, Colombia, Honduras, Guatemala, Perú y México.

USAID fue – de parte del Departamento de Estado norteamericano y la CIA – la entidad financiera promotora de la injerencia subversiva de Alan Gross en Cuba (2004) y ante el silencio incivil, cómplice y criminal de organizaciones como la OEA y la ONU sigue campante violado – sin sangre en la cara - leyes internacionales como el derecho a la no injerencia y libre determinación de los pueblos la cual solo sirve para decorar doxologías del derecho internacional sin peso especifico de facto.

Al igual que Alan Gross en el 2004, ahora Washington – de forma totalmente pública y no más encubierta – sacan a la luz la formación de la “fuerza operativa en materia de Internet para Cuba formada por representantes gubernamentales y no gubernamentales (USAID y Oficina de Iniciativas de Transición, OTI).

Así lo confirmó el portal de la Embajada de los EEUU en Cuba: “Conforme lo dispuesto en el Memorándum Presidencial sobre Seguridad Nacional del presidente Trump del 16 de junio de 2017, denominado ‘Fortalecimiento de la política de Estados Unidos sobre Cuba’, el Departamento de Estado convocó el miércoles 7 de febrero a un Grupo de Trabajo de Internet para Cuba integrado por representantes del Gobierno de los Estados Unidos y representantes no gubernamentales”. [1]

La presencia de USAID y su participación activa en asuntos internos de la región no es novedad. Esta organización cubre perfectamente los vacios y la nula presencia de Estado promovida intencionalmente con ese fin, corporativizar los Estados convirtiéndolos en representaciones paraestatales del gobierno de Washington y corporaciones financieras y comerciales afines.

Al ser preguntado Alan Gross sobre las intenciones de los EEUU en la Grande de las Antillas no dudo en responder: “¿Están bromeando?”.

Pareciera que la inclemencia de la perdida de la libertad forjó en el ex infiltrado estadounidense el sentido del error en cualquier acto de injerencia e intento de violación a la libre determinación y soberanía de los pueblos.  Gross continuó añadiendo: “Se supone que debemos aprender de nuestros errores” […] “Aprendí por las malas que es ilegal distribuir cualquier cosa en Cuba financiada total o parcialmente por el gobierno de los EEUU […] Hasta que el Gobierno de Cuba no desee el tipo de asistencia que Estados Unidos es capaz de brindar, Estados Unidos no debería estar haciendo cosas allí…”

El formato injerencista de los EEUU donde la patológica obsesión por el control geopolítico global quiebra todas las bases a la libre determinación de los pueblos como derecho universal va más allá de lo sensatamente comprensible. Es paradójico que ex agentes infiltrados en Cuba como Gross reconozca la sórdida y amenazante postura de Washington: “El gobierno de EEUU debería analizar el tema de internet directamente con Cuba, proporcionando detalles, por ejemplo, de cómo podría impulsar el crecimiento económico”.[2]   Lo que omite Gross – y no por ignorancia – es la anulación, en los EEUU, de la neutralidad de internet (Net Neutrality) en clara violación al derecho equitativo a la información y en favorecimiento a un pequeño conglomerado de compañías monopólicas del servicio de las telecomunicaciones. 

Promoviendo dictaduras con rostros de democracias.  La discusión que pasa por agua tibia a Gross y otros opinólogos es el tema del fin – en los EEUU - de la neutralidad de internet, informática o de las redes. Accion que acepta y defiende en sis mismo acciones informáticamente antidemocráticas como: el bloqueo, throttling ó “estrangulamiento”, ausencia de transparencia y lucro indiscriminado.

¿Esta es la democracia defendida por los EEUU y defendida por sus aliados?

Vale decir, la democratización equitativa del sistema de telecomunicaciones cibernéticas promovida por el ex presidente Barack Obama (2014) ha sido desplazada por los nuevos dictámenes de la gestión Trump. La promoción del principio de la igualdad informática promovida por Obama hizo frente a la discriminada corporativización de las redes de telecomunicación concentrada en manos de cuatro compañías en los EEUU: AT&T, Comcast, Time Warner y Verizon.

Para Washington la concentración de poderes en el Estado y esferas democráticas de poder popular es signo de dictadura y la concentración de poder financiero-económico-productivo y comercail en manos del 1% de corporaciones a nivel global es señal de democracia.

El desplazamiento de cualquier intención democratizadora – en los EEUU - en materia de telecomunicaciones ha visto su fin.  La dictadura del mercado monopólico es aceptada como “herramienta democratizadora” según los principios ideológicos liberales avasallando contra todo principio de soberanía informática como lo que pretenden llevar a cabo en la Republica de Cuba. Principios liberales históricamente apañados por todo organismo internacional montado – desde sus inicios – a la medida del control geopolítico global en manos de Washington y subalternos.  Es desde esta óptica comercial de tinte mercantilista de las comunicaciones donde se esconde – desde siempre – en el vientre de la bestia el encubrimiento de gérmenes neocolonizadores presentados al mundo entero como  libertadores de supuestas dictaduras. 

Más del 50% de la población norteamericana tiene el monopolio de cuatro compañías de telecomunicaciones y ahora con la eliminación de la neutralidad de internet el poder de las mismas es elevado a la enésima potencia. La discriminación y exclusión al derecho a la libertad y equidad de acceso a la información en los EEUU ha sido eliminada. No es casualidad, obviamente, que el director de la Comisión Federal de Comunicaciones (Federal Communications Commission, FCC), Ajit Pai, es el ex abogado de la compañía Verizon, mega organismo de la telecomunicaciones. Ajit Pai abogó, a favor de las compañías a las cuales continua sirviendo, monopolizando y controlando el sistema informático  controlando todo acceso libre, equitativo y no discriminatorio a las redes.

¿Cómo puede seguirse sosteniendo la teoría del país de las libertades y perfecta democracia cuando día a día se estrangulan - a vista del mundo entero - derechos fundamentales de su población como el acceso equitativo a la comunicación e información  afectando al mundo entero?

La creación de la fuerza especial en informática creada por los EEUU para ingresar a Cuba (Cuba Internet Task Force)[3] encubre el detalle que se esconde detrás de las buenas intenciones de Washington en la Grande las Antillas: el fin de la neutralidad de internet y la perpetua dictadura del monopolio de las comunicaciones. Esta clara la intención desesperada de los EEUU y aliados por continuar expandiendo el alicaído imperio haciendo de Cuba el obsceno patio trasero que nunca más fue desde aquel victorioso 1959.

Así como en Venezuela se aproximan las elecciones presidenciales (22 de abril de 2018), donde el pueblo manifestará democrática y soberanamente su voluntad,  así se aproximan las elecciones presidenciales en Cuba (19 abril de 2018) donde democráticamente el pueblo elegirá su nuevo liderazgo. ¿Qué le asusta a Washington de estos procesos democráticos celebrados de forma libre y soberana por las hermanas republicas de Cuba y Venezuela? ¿Se podrían llamar dictaduras a quienes respetan la voluntad del pueblo respaldados por magnas constituciones y veraces representaciones políticas? ¿Es democracia la cultura de los lobbies, el monopolio corporativo, la injerencia político-económico-militar a nivel global y la dictadura de la ideología del mercado?

¿Usted puede creer que con argucias – como las siguientes - emitidas por el Departamento de Estado Estadounidense sobre la Cuba Internet Task Force se puede seguir sosteniendo las “buenas intenciones” de Washington sobre la supuesta dictadura del pueblo cubano? : “el grupo de trabajo examinará los desafíos tecnológicos y las oportunidades para ampliar el acceso a Internet y los medios de prensa independientes en Cuba", “[El objetivo es] promover el flujo de información libre y no regulada en Cuba”, “[es promover] actividades que fomentan la libertad de expresión a través de medios independientes y la libre internet para que el pueblo cubano pueda disfrutar del flujo libre y no regulado de información” o aquellas emitidas por la legisladora republicana de origen cubano Ileana Ros-Lehtinen: “Es de vital importancia que la fuerza especial trabaje para contrarrestar el control ejercido por el régimen de Castro sobre la propaganda política”.[4]

Lo que nos queda claro hasta la saciedad es la renuencia de Washington al no aceptar el fin del viejo paradigma hegemónico. No son sus buenas intenciones los que movilizan sus agonizantes estremecimientos globales: exasperadas luchas anti-nucleares, fratricida presencia político-militar en medio del conflicto palestino-israelí, descontrolada infiltración injerencista político-militar en América Latina (Cuba, Venezuela, Brasil, Argentina, Ecuador, Paraguay, Honduras, Costa Rica, Perú, Chile, etc.), febril reconfiguración del control geopolítico a nivel global de espaldas al nuevo escenario macro económico liderado por China, Rusia, etc.

Ni Gross, ni Cuba Internet Task Force, ni Rex Tillerson, ni Luis Leonardo Almagro Lemes, ni el “Grupo de Lima”, ni Google, ni Facebook, se encuentran involucrados con la defensa de los derechos fundamentales de las clases excluidas, ni la creación de sistemas democráticos de rostros económicamente eco-humanos. La dictadura del sistema de comunicaciones, la crisis climática, la proliferación ideológica del golpe suave y la patológica lucha por el control petro-acuífero-geopolítico nos está arrastrando al borde de un desastroso abismo eco-humano en donde el desarrollo de propuestas alternativas a nivel global es silenciado por el monopolio y control global de las comunicaciones. Las fuerzas del mal no toleran espacios liberados de fratricidio, ecocidio o homofobias, xenofobias, aporofobias, dikefobias, eleutherofobia, prosofobia, etc. Las fuerzas del control de los cuerpos y conciencias están dispuestas a todo con tal de acumular el poder en su máxima expresión.

Y, como si fuere poco, en medio de esta desquiciada, deshumana y anti-ecológica conspiración planetaria se sacian industriales sedes y hambrunas mercantiles del 1% de la población mundial.

Irónicamente, imagínense que este 1% - sin tener más opción que la sensatez, fingida o no - reunido en el Foro Económico Mundial en Davos (Cologne, Suiza), reconocen el drama de la situación mundial encubierta, por ejemplo, en manotazos de ahogados como la defensa de la presencia de internet en Cuba: “Estamos viviendo momentos inusuales. El orden liberal mundial se encuentra en un avanzado estado de crisis. Y a medida que el mundo cambia rápidamente de una realidad unipolar a una multipolar, el sistema internacional mismo está expuesto a una profunda inestabilidad […] El espectacular auge de China en las últimas dos décadas y el declive relativo de los EE. UU. significa que la tensión finalmente estallará […] La posibilidad de errores de cálculo graves —incluidas las acciones comerciales de los Estados Unidos contra China— está aumentando, con efectos en cadena potencialmente devastadores para la economía mundial […] Si queremos sobrevivir a la transición geopolítica mundial, antes debemos aceptar que la era de la hegemonía de los Estados Unidos llegó a su fin”. [5]

Bajo esta clara y desmontadora confesión – casi profética – de una de las esferas más importantes de los grupos de poder mundial reunidos en Davos sostenemos que Cuba, en medio del estrangulamiento asesino económico, comercial y financiero al cual lo ha sometido los EEUU por más de 60 años, está trabajando firmemente en el desarrollo comunicacional del sistema informático de su pueblo. Evidentemente no a la velocidad que lo hacen los aliados de Washington, como el “Grupo de Lima”, (como hacerlo con el inhumano bloqueo) lo cual no quita que el sentido de su soberanía informática sea defendido revolucionariamente y el pueblo cubano vaya nivelándose – con criterios de equidad y sin concentración lucrativamente monopólica de los medios – con los demás sectores de desarrollo de alto nivel como ciencias, educación, salud, artes y deportes, lo cual posiciona a la Isla bonita en los primeros lugares de desarrollo integral a nivel global.

Finalmente, hablando de y en función de índices de desarrollo, lo cual por lo visto es teoría y práctica ajena al huésped de la Casa Blanca y el “Grupo de Lima”, el premio nobel de economía, Amartya Sen nos plantea una reflexión con la cual nos entrega la posibilidad de señalar claramente quien es Democracia y quien Dictadura:

“El desarrollo exige la eliminación de las principales fuentes de privación de libertad: la pobreza y la tiranía, la escasez de oportunidades económicas y las privaciones sistemáticas, el abandono en que pueden  encontrarse los servicios públicos y la intolerancia o el exceso de intervención de los Estados represivos […] A veces la falta de libertades fundamentales está relacionada directamente con la pobreza económica, que priva a los individuos de la libertad necesaria para satisfacer el hambre, para conseguir un nivel de nutrición suficiente, para poner remedio a enfermedades tratables, para vivir dignamente o tener una vivienda aceptable o para disponer de agua limpia o de servicios de saneamiento. En otros casos, la privación de libertad está estrechamente relacionada con la falta de servicios y atención social públicos, como la usencia de programas epidemiológicos o de sistemas organizados de asistencia sanitaria o de educación o de instituciones eficaces para el mantenimiento de la paz y el orden locales. En otros casos, la violación de la libertad se debe directamente a la negativa de los regímenes autoritarios a reconocer las libertades políticas y civiles y a la imposición de restricciones a la libertad para participar en la vida social, política y económica de la comunidad”.[6]

Juzguen ustedes.




NOTAS:

[1]Embajada de los Estados Unidos en Cuba. Departamento de Estado de los Estados Unidos.
Oficina de la Portavoz. Comunicado de prensa. Primera reunión del Grupo de Trabajo de Internet para Cuba. 07/02/18. En
https://cu.usembassy.gov/es/21279-2/. Revisado: 10/02/18.
[2]Reuters. ENTREVISTA-Alan Gross, exprisionero en Cuba, critica plan EEUU para expandir internet en la isla. Por Sarah Marsh. 04/02/18. En https://lta.reuters.com/article/topNews/idLTAKBN1FO0J4-OUSLT. Revisado: 05/02/18.
[3]U.S Departament of State. Creation of the Cuba Internet Task Force. En: https://www.state.gov/r/pa/prs/ps/2018/01/277599.htm Revisado: 18/0218.
[4] Fuente: EuropaPress. La fuerza especial creada por EEUU para expandir Internet en Cuba se reúne por primera vez en Washington. En: http://www.europapress.es/internacional/noticia-fuerza-especial-creada-eeuu-expandir-internet-cuba-reune-primera-vez-washington-20180208051853.html. Revisado:17/02/18
[5]World Economic Forum. Cinco hechos que son necesarios para entender el nuevo orden global. En: https://www.weforum.org/es/agenda/2018/02/cinco-hechos-que-son-necesarios-para-entender-el-nuevo-orden-global. Revisado: 18/02/18
[6] Amatya Sen. Desarrollo y Libertad. Barcelona: Editorial Planeta., p. 19-20, 2000

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