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sábado, 28 de mayo de 2022

Elecciones en Colombia 2022

 La gran preocupación de la derecha latinoamericana es perder el espacio estratégico que por muchas décadas ha controlado en Colombia. Si pierde el poder político en esa nación, también se debilitaría la hegemonía que la Casa Blanca tiene en la región en un momento axial cuando libra una cruenta guerra en Europa contra Rusia.

Adalberto Santana / Para Con Nuestra América
Desde Ciudad de México


El domingo 29 de mayo de 2022 se llevará a cabo la elección del nuevo presidente colombiano que durará en el cargo cuatro años (2022-2028). Un país con más de 51 millones de habitantes con el derecho a votar de más de 38,5 millones, tiene varios candidatos. Sin embargo, los más seguros de figurar en los primeros lugares son básicamente tres. Quien hasta el momento encabeza la lista de las encuestas es Gustavo Petro el candidato de las izquierdas colombianas. 

 

Los otros dos aspirantes que podrían figurar disputándose en el segundo y tercer lugar son dos candidatos de las derechas. Por un lado, figura el que representa la continuidad del actual gobierno que encabeza el presidente Iván Duque, Federico Gutiérrez, representante de las fuerzas del hombre fuerte del poder tras el trono (Álvaro Uribe Vélez). Político e ideólogo de las derechas latinoamericanas. El otro candidato de las fuerzas tradicionales es el empresario Rodolfo Hernández, quien es la alternativa derechista frente al desgaste del sistema conservador colombiano.  Un cuarto candidato ya sin ninguna perspectiva de figurar en los primeros tres lugares es Fajardo, quien es el candidato del centro derecha.

 

De tal suerte que, para el conjunto de los aspirantes del bloque derechista, es llegar a ocupar el segundo lugar en la elección del domingo 29 de mayo, para así buscar una alianza conservadora, en el caso de que Gustavo Petro no llegara a acumular más de 50 por ciento más uno de los votos y se vea en la situación de ir a una segunda ronda electoral para el 19 de junio.

 

En otras palabras Gustavo Petro en su tercera candidatura presidencial hoy ha acumulado a la mayoría del voto popular y, figura por primera vez como el posible ganador de la primera vuelta.  El reto para el conjunto de la candidatura del Pacto Histórico, Gustavo Petro (presidente) y Francia Márquez Mina (vicepresidente), es contar con más del 51 por ciento de los sufragios. De esa manera ya no tendría que ir a una segunda ronda. La estrategia electoral de la izquierda colombiana es ganar el voto de los abstencionistas. Llevar a votar a los amplios sectores populares que encuentren en la fórmula de la izquierda la alternativa a los graves problemas que el sistema político colombiano ha generado en su historia como es la creciente corrupción gubernamental, la inseguridad ciudadana, la falta de empleo, la atención de la salud y la educación para los jóvenes y los más vulnerables como son los adultos mayores y los miembros de las comunidades indígenas y afrodescendientes colombianos.

 

Un valor agregado en la fórmula de las izquierdas, es la candidatura de Francia Márquez Mina como vicepresidente. Recibió el Premio Goldman en 2018, más conocido como el “Nobel ambiental”.  Ella ha señalado: “Soy hija del pueblo negro raizal y palenquero, madre de dos hijos. Nací en Suárez, Cauca, entre montañas surcada por dos ríos, un territorio ancestral donde aprendí el valor de la tierra. Mis raíces son los pasos de cientos de miles de seres humanos esclavizados que entregaron su vida y trabajo por parir la libertad para esta nación. Desde muy joven hice de este legado mi mandato, mi sentir y mi pensar. De ellos y ellas aprendí que la dignidad no tiene precio y que resistir no es aguantar”. 

 

De ahí que la fórmula del Pacto Histórico, tenga en su programa la creación del Ministerio de la Igualdad para contrarrestar las desigualdades y reducir la brecha entre hombres y mujeres. La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), señala que en Colombia aproximadamente 7,3 millones sufren de inseguridad alimentaria. Así, en lo económico la propuesta de la izquierda es generar una economía productiva desincentivando al latifundio improductivo, en un país que carece de una reforma agraria. Al mismo tiempo de alentar la micro, pequeña y mediana empresa. Para el Pacto Histórico se defenderá la industria nacional e incrementará el salario de los trabajadores y se otorgaran becas a los jóvenes para su formación productiva y evitar su incorporación al crimen organizado.  

 

En tanto las propuestas de las derechas colombianas si bien en términos generales reconocen al problema de la corrupción como uno de los mayores problemas del país, sus propuestas no van al fondo de las soluciones. En gran medida sus alternativas son cosméticas y su narrativa repite lo que en otros países latinoamericanos sus pares han enfatizado que Petro sigue el modelo de Chávez y Maduro. Cuando en la realidad su proyecto y programa es mucho más semejante al discurso de Andrés Manuel Andrés López Obrador en México o al de Gabriel Boric en Chile.

 

Pero la gran preocupación de la derecha latinoamericana es perder el espacio estratégico que por muchas décadas ha controlado en Colombia. Si pierde el poder político en esa nación, también se debilitaría la hegemonía que la Casa Blanca tiene en la región en un momento axial cuando libra una cruenta guerra en Europa contra Rusia. Con ello el poder imperial de Washington recibiría un golpe inédito lo que le llevaría a tener que negociar con otros gobiernos latinoamericanos. Un nuevo escenario con una Colombia que pertenece a la Organización del Atlántico Norte (OTAN), ya ubicada en el bloque progresista, sería fatal para el poder de EU. Pero, por otro lado, para los pueblos y países latinoamericanos con una Colombia independiente y realmente soberana del poder imperial, sería un gran aliciente para generar y fortalecer una real integración social, económica y política de América Latina y el Caribe.  

 

Nuestra impresión recogiendo distintos testimonios de ciudadanos colombianos en estos últimos días de campaña en Bogotá, es que brindarán su voto a Gustavo Petro y Francia Márquez Mina.  Nos dicho que han perdido el miedo y eso seguramente es un paso firme en la construcción de “La hora del cambio por la vida”, lema de la campaña del Pacto Histórico. 

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