El desangre a su sociedad que a diario lleva a cabo el gobierno de EEUU parece no tener límite y marca una tendencia que, a corto o mediano plazo, provocará males mayores.
Ernestro Wong Maestre / Para Con Nuestra América
Desde Caracas, Venezuela
Solo en los meses de este año se contabilizan 107 enfrentamientos armados, algunos de ellos provocados por algún pistolero aislado con fusiles de guerra, según datos difundidos por Gun Violence Archive (GVA) y reportado por la agencia HispanTV(1). Al mismo tiempo, los negocios de la industria militar son estimulados con el linkage de la política exterior estadounidense al facilitar millones de dólares a otros gobiernos para adquirir armamentos y vehículos militares “made in usa” como lo indica el reciente anuncio de la Casa Blanca de destinar $500 millones a Taiwán sin ni siquiera ser aprobados por el Congreso de ese país (2).
Los contrastes entre la desidia supremacista de la élite gobernante contra su sociedad y las facilidades y donaciones que esa élite ofrece a gobiernos extranjeros para poner en peligro a esos propios pueblos son también revelantes de la crisis ético-política que hoy sacude a EEUU. ¿A qué situación irreversible está conduciendo esa camarilla neoconservadora enquistada en los altos niveles del poder estadounidense desde hace cuatro décadas?
El incremento de los conflictos violentos mediados por armas de guerra o por actitudes de los cuerpos armados contra algunos sectores y grupos sociales marcan tendencias que llaman la atención de analistas y políticos con poder comunicacional porque asocian con razón actores sociales potencialmente rebeldes o contestatarios con políticas públicas erradas de significación negativa para el bienestar de las familias y de ese Otro que no los reconoce su propio gobierno al colocarlos fuera de su acción, es decir, a invisibilizarlos, también en contraste con quienes sin tener poder los visibilizan y reclaman públicamente por ellos.
Las alarmas siguen acumulando potencia también en los niveles intermedios de la sociedad empresarial porque se incrementa la centralización y concentración del capital que conduce a incremento de las quiebras de empresas medianas a costa de las grandes, y de estas a costa de las megacoporaciones globalistas, entre ellas las corporaciones financieras (bancario-industriales) hasta el punto que ya se afirma que el 50% de los bancos de EEUU van camino a quebrar por ser ya insolventes.(3) lo cual contradice al propio Jerome Powel, presidente de la Reserva Federal, quien hace un año visualizaba solo una “leve” recesión.(4). La realidad es que se está gestando una crisis del tipo 2008-2009 con fuertes secuelas y con consecuencias de rebeldía social como las ocurridas en varias ciudades de EEUU en 2011, entre ellas y más significativa las de la ciudad de Wisconsin y que recabaron la solidaridad de fuerzas sociales por cientos de miles de Nueva York, Los Ángeles, Columbus, Ohio, Topeka, Kansas, Harrisburg, Pensilvania, Olimpia y Washington, es decir de este a oeste del territorio de ese país. ¿Volverá a las calles de EEUU algún movimiento como aquel Occupy Wall Street que sacudió al sistema político y económico?¿se articulará a la crisis de seguridad ciudadana y a la desestructuración familiar por el creciente uso del fentanilo de parte de la juventud?.
"A corto plazo –explica Seru en el New York Times- una combinación perjudicial de tipos de interés en rápido aumento, cambios importantes en los patrones de trabajo y la posibilidad de una recesión podría provocar una contracción del crédito no vista desde la crisis financiera de 2008", según el portal Sputnik (5). ¿Y qué ocurre cuando se reducen los créditos, el país se hace más incompetente mundialmente y se desmoralizan internamente “tirios y troyanos” o se agudiza la contradicción trabajo-capital?.
El desangre a su sociedad que a diario lleva a cabo el gobierno de EEUU parece no tener límite y marca una tendencia que, a corto o mediano plazo, provocará males mayores. ¿Le serán suficiente los recursos energéticos que el gobierno y sus corporaciones sustraen ilegalmente, es decir, roban de Libia y Siria para aliviar el desangre o serán para seguir derrochando recursos en aventuras militares of shore que podrían provocar hasta una guerra mundial en el propio territorio estadounidense?¿Se podrían esperar protestas violentas o algún tipo de guerra civil de baja intensidad alentadas por la desposesión violenta llevada a cabo por Washington?¿se avizora el necesario cambio de régimen político en EEUU?.
Solo el pueblo estadounidense tiene la palabra y tendrá la responsabilidad compartida con su élite “electa” o en las sombras, de las graves consecuencias que pululan en el imaginario mundial y poco a poco más en las propias representaciones sociales del pueblo de Abraham Lincoln y Malcolm X.
Citas
(1) Véanse otros datos en https://www.hispantv.com/noticias/ee-uu-/539692/tiroteos-muertos-heridos-record
(2) Véase nota en http://www.hispantv.com/noticias/ee-uu-/564905/ayuda-militar-taiwan
(3) Véase reporte de Sputnik en https://sputniknews.lat/20230506/se-avecina-un-peligro-real-la-mitad-de-los-bancos-en-eeuu-podria-caer-en-la-insolvencia-1139137961.html
(4) Ibidem.
(5) Ibidem.
El autor es Investigador y director del Centro de Estudios de Economía Política de la UBV. Analista político y profesor universitario de sistema político, epistemología, geopolítica, teorías de las relaciones internacionales y del sistema mundo, derecho internacional público, procesos de integración, de seguridad y defensa, entre otras materias. Asesor de Tesis de Maestría y Doctorado. Correo:wongmaestre@gmail.com
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