Así como las invasiones coloniales de los siglos XV-XVI,
los bloqueos financieros, económicos, comerciales y tecnólogicos neocoloniales
de los siglos XX-XXI, no lograron ni lograrán destruir, menos aún someter, la
estructura digna y soberana de los pueblos, competencias como los juegos Panamericanos,
olímpicos o mundiales son medidores de la fuerza de las naciones así como muestras
de la inequidad entre los mismos.
José Toledo
Alcalde / Especial para Con Nuestra América
![]() |
Inauguración de los Juegos Panamericanos en Lima. |
Pero no solo los inhumanos bloqueos impuestos por
Washington son muestra de la crueldad esclavista a escala planetaria. En
eventos globales como los últimos juegos Panamericanos, celebrados en el Perú, se
evidencia la descarada vigencia del show de la lujuría del poder y el
despiadado espectáculo imperial entre colonizadores y colonizados.
¿Cómo es posible, en un mundo donde los guardianes de la
“democracia” y “libertad” se adjudican roles heroícos de justicia, que en tales
certamenes existan pueblos, colonias, que como símbolo de enfermizo poder
hegemónico sean expuestos a la vergüenza internacional del deporte sin oportunidad
alguna de adjudicarse medalla al mérito? ¿Cómo es posible celebrar espéctaculos
donde se exhiben e evidencian el patológico desequilibrio social y económico en
el mundo?