sábado, 22 de marzo de 2025

Honor a los que resisten en la Argentina de Milei

 El 29 de marzo de 1883 en una crónica publicada en ocasión de los funerales cívicos que se rindieron en Nueva York  a Carlos Marx muerto ese mes, escribió José Martí -quien no era marxista- algo que hubiera celebrado el mismísimo pensador de Tréveris, seguro él mismo según lo declaró de no serlo tampoco: “Como se puso del lado de los débiles, merece honor.”  

Carlos María Romero Sosa / Para Con Nuestra América
Desde Buenos Aires, Argentina

Aquí y ahora valga  tomar  esa expresión de homenaje vertida por el mártir cubano, extendiéndola a cada uno de los manifestantes que el miércoles 12 de marzo de este año, acompañó,
 a riesgo de su vida o integridad física la marcha de los jubilados, principales víctimas del ajuste salvaje del presidente Milei y su comparsa de payasos sanguinarios, corruptos, antiindustrialistas, negacionistas del genocidio de los 30.000 desparecidos en la última dictadura, mendicantes al FMI, terraplanistas, antifeministas, enemigos declarados de las minorías sexuales y de los pueblos originarios, antiecologistas y demás pecados capitales contra el género humano y el planeta tierra. 

 

Si hay un sector débil y rebajado a una inhumana situación de miseria al serle congelada la dádiva mensual del bono de 70.000 pesos (unos U$70 dólares en Argentina), destruidos por la inflación de más de una año lo cual les alcanza, solo para hacer dos comidas frugales al día (leche, papa con tomate, agua mineral, un trozo de carne de paleta, y dos cafés con azúcar) durante 16 días de los 30 que hay entre cobro y cobro. Además se les ha privado, por ejemplo, de varios de los medicamentos que en forma gratuita les otorgaba el PAMI (Programa de Asistencia Médica Integral -para adultos mayores-), ese sector es la clase pasiva de la República Argentina. Y en especial la que recibe la jubilación mínima que estadísticamente lo integra más del setenta por ciento de los titulares del beneficio, si es que así puede  llamársele con triste ironía. 

 

Cada decisión de la Casa Rosada está pensada para postergar más aun a los ya postergados jubilados, pensionados, desocupados, trabajadores activos con salarios bajo la línea de la pobreza, estudiantes que ven cada vez más reducido el presupuesto universitario, docentes de todos los niveles y científicos del CONICET (Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y técnicas); un organismo al que Milei desprecia y desfinancia creado en 1958 y cuyo primer presidente fue el Premio Nobel en medicina profesor Bernardo Houssay. 

 

Nada de qué extrañarse.  No son otras las políticas de la ultra derecha y  el neofascismo dependiente y antinacional del gobierno surgido del balotaje en aquel desolador domingo 19 de noviembre de 2023. Un resultado demostrativo de que es discutible  al día de hoy la consigna  vertida en otro contexto histórico por Thomas  Thyne: “Vox populi, vox Dei”. 

 

 Porque ante el cincuenta y seis  por ciento de la ciudadanía que entonces sufragó por Milei,  hay que decirlo sin rubores ni demagogia: a veces los pueblos se equivocan, algo que tenía bien en claro Henrik Johan Ibsen al mostrar las  ingratitudes y ataques recibidos por el Doctor Stockmann en su drama “El enemigo del pueblo”. Y qué fácil es hacer errar a las multitudes cuando los “mass media” y las redes sociales se confabulan para presentar como opciones de cambio, frente a políticos tradicionales cuyas tareas suelen consistir en defraudar expectativas, a ciertos personajes sacados de la galera del “Show televisivo” por el más crudo capitalismo internacional y el especulativo “círculo rojo” de nuestro  infierno local.

 

El individualismo concebido por el Iluminismo, resulta ser en estos tiempos de redes negadoras de la sociabilidad y del yo-tu sin filtros virtuales y mejilla a mejilla como en la vieja canción de Irving Berlin, una pura autosugestión de tantas y tantos que se creen autónomos. Tilingos de clase media o de la baja alienados estos, por decirlo con terminología de Marx –antes de Hegel- que estudió Gyorgy Lukács en “Historia y conciencia de clase”. Por eso constituye una imperiosa tarea de responsabilidad cívica  pertrecharse con una coraza de auténtica y no cacareada libertad, para pensar y decidir contra las propagandas y los eslóganes impuestos desde los poderes ocultos que de hecho la anulan, haciendo prevalecer en mentes y corazones los dictados de los mercados financieros que solo permiten e incentivan el desarrollo de sentimientos individualistas bajos y negativos, como el egoísmo traducido en el sálvese quien pueda, el afán especulativo y la competencia desleal, en fin la versión siglo XXI del “fetichismo de la mercancía”. 

 

David desafió a Goliat y lo venció. Así que hay esperanza, incluso contra la aventura extremista y en el límite con el terrorismo de Estado de este régimen antisocial que declaró en los hechos para el miércoles 19 de marzo al prever una nueva y masiva movilización, un virtual estado de sitio en la ciudad de Buenos Aires. 

 

Veamos el vaso medio lleno: un buen número de argentinos supieron en su hora hacer oídos sordos a la retórica, en el caso de Javier Milei reveladora de su desquicio mental y a la degradación moral de sus consignas como la compra de niños y el tráfico de órganos humanos. Tal el candidato anarcocapitalista digitado por el dios dinero, hoy primer mandatario con legitimidad de origen pero cada vez menos de ejercicio.  

 

Sigamos viendo el vaso medio lleno: otro buen número de personas sale a marchar junto a los jubilados entre los palos de policías y demás fuerzas de seguridad bravas, las balas de goma y las granadas de gas lacrimógeno. El golpe de una de las granadas ha llevado al fotógrafo gráfico, Pablo Grillo, de apenas 33, años quien la recibió en su cabeza, mientras agachado y frente a las “Fuerzas de Seguridad” sacaba fotografías, a su estado crítico actual con pérdida de masa encefálica.   

 

La represión criminal promovida por la jánica ministra Patricia Bullrich, aunque vale recordar que el dios Jano tenía solo dos caras y la otrora extrema montonera Patricia muchas más, puede ser leída de varias formas: como una advertencia a los que protestan y seguiremos protestando en el futuro. O una forma delictiva de violencia institucional -a calificar sin duda y con benévola aplicación del  “in dubio pro reo” por su dolo eventual- para complacer al sector más fanático de La Libertad Avanza y a los dispuestos a dar mano dura de otras corrientes conservadoras. O para solazarse en sus propios delirios etílicos de Jefatura inexistente de algún grupo que bajo el amparo de la forma Partido político intente hacerse con el poder, con la crueldad por la crueldad misma como bandera a lo Calígula o a lo Iván el Terrible. O, quizá, la ministra tiene noticias a través de los servicios de inteligencia gubernamentales, de la CIA, el Mossad israelí o de todo ese aquelarre  junto, de que se va resquebrajando la adhesión al gobierno al que entró ella, candidata perdedora a presidenta por el  PRO de Mauricio Macri de triste memoria,  como Poncio Pilatos al Credo.  

 

Milei  y su “troupe” no son indestructibles. En la variación está el gusto, y por fortuna eso vale para los que ostentan -y detentan- el poder cuando se les inclina en contra la balanza. Hay ciclos históricos agotadores es verdad, períodos amargos para los pueblos, autoritarismos crecientes que se desinflan a la larga. Porque nada es eterno en este mundo. También  la “gente de bien” a la que dice representar el gobierno, por padecer en gran medida de una existencia inauténtica, es adicta al  afán de novedades que describió Heidegger. La locura de arriba aburre a la larga. O contagia y no se ha visto más que en películas de mal gusto el triunfo de los zombis. De las ruinas resurge la mítica Ave Fénix. 

 

Por de pronto que sigan las movilizaciones. Que se multipliquen en número y en participantes. Y que existan muchas Jueces con mayúscula como la doctora  Karina Andrade, quien en su resolución  de libertad a los detenidos en la marcha del 12 de marzo, defendió: “el derecho constitucional a la protesta, a manifestarse en democracia y a la libertad de expresión en un día como hoy donde se convoca desde los sectores más vulnerables de nuestra Nación como son los adultos mayores protegidos convencionalmente, desde el Poder Judicial corresponde atender a ello.”.  

 

También a ella, por supuesto al gravemente herido Pablo Grillo y el resto de los lesionados y vejados por la represión el 12 de marzo,  fecha lúgubre para la democracia y la Patria, parafraseando a Martí cabe decirles, que  por ponerse del lado de los débiles, merecen honor.      

1 comentario:

M.Martinez Acosta dijo...


"Con Nuestra América: Honor a los que resisten en la Argentina de Milei" https://connuestraamerica.blogspot.com/2025/03/honor-los-que-resisten-en-la-argentina.html?m=1





















Gracias Romero Sosa por querer, saber y por ende poder..
expresar en las letras, las verdades y el sentir de millones de ciudadanos, acerca de las ya trájicas vivencias que azotan a nuestra amada Argentina.