Con los ánimos caldeados, la gente en las calles y los precios en alza frente a un fin de año que recuerda al de hace más de dos décadas, con un presidente que tuvo que huir en helicóptero; con su natural indiferencia y su denodada fe en la apertura de los mercados, este sábado 20, Javier Milei partirá rumbo a Brasil a la reunión del Mercosur…
Roberto Utrero Guerra / Especial para Con Nuestra América
Desde Mendoza, Argentina
Tras ganar las elecciones en Chile, el presidente electo José Antonio Kast, llegó a Argentina en su primer viaje para reunirse con su par local, Javier Milei, quien lo recibió en Casa Rosada donde estuvieron reunidos dos horas. Representantes ambos de la ultraderecha, inconscientemente volvieron al siglo XIX, no precisamente a los conflictos bélicos alentados desde el país trasandinos por cuestiones de límites, sino seguramente, al exilio sarmientino, y la famosa polémica entablada con Alberdi el autor de Las Bases de la Constitución nacional de 1853, en sus cartas Las ciento y una, contra las Cartas quillotanas del abogado constitucionalista que coincide en residir en la localidad chilena de Quillota al momento de redactarse la Constitución en Santa Fe. En aquellos momentos, en sus lances seductores a través de su palabra en El mercurio, Sarmiento no dudaba en repetir que desde el sur del río Bio bio, la Patagonia era chilena. Dato no menor para un país expansionista, donde los tsunamis del Pacífico erosionan sus costas y restan terreno a sus pobladores. Han mostrado tanta afinidad ambos presidentes, el actual en funciones y el próximo a asumir, que es probable que el vice ministro de Economía de Luis Caputo, José Luis Daza, pase a formar parte del gobierno trasandino. La derecha de ambos lados totalmente de acuerdo.
Más allá de esto, debemos reconocer que con Chile compartimos desde la etapa independiente, alrededor de seis mil kilómetros de frontera, dato que impone a los gobernantes de ambos países en cualquier época y momento establecer políticas responsables de frontera compartida. Cuestión que algunos presidentes en el pasado lo entendieron y en consecuencia pusieron en práctica, firmando acuerdos como el Tratado del ABC entre Argentina, Brasil y Chile, en momentos en que Perón gobernaba Argentina y Chile, tenía al General Carlos Ibáñez del Campo en 1953, o el Tratado de Integración y Complementación Minera firmado por Carlos Menem de Argentina y Eduardo Frei en por Chile en 1997. Argumentos que consolidan la posibilidad de un corredor bioceánico.
Pero aquí abajo abajo/ el hambre disponible/ recorre el fruto amargo/ de lo que otros deciden/ mientras que el tiempo pasa/ y pasan los desfiles/ y se hacen otras cosas/ que el norte no prohíbe/ con su esperanza dura/ el sur también existe.
Cuando escribió estos versos Benedetti, el Plan Cóndor se había extendido por la región y la dictadura iniciada en Chile con Pinochet llevaba más de una década y había dictado su propia Constitución en 1980, la que sigue en vigencia, el resto de los países se debatían cercados en su propio territorio; faltaban casi dos décadas para una respuesta popular en la región de la mano del primer progresismo, que en 2005, pudo de decirle no al ALCA en la Cumbre de las Américas en Mar del Plata. Algo que dos décadas más tarde parece prehistoria, un relato increíble para los jóvenes nacidos en este nuevo milenio.
Con sus predicadores/ sus gases que envenenan/ su escuela de Chicago/ sus dueños de la tierra/ con sus trapos de lujo/ y su pobre osamenta/ sus defensas gastadas/ sus gastos de defensa/ son su gesta invasora/ el norte es el que ordena.
El modelo neoliberal de Milton Friedman, cerraba el ciclo de los treinta años dorados de posguerra y decretaba la muerte del Estado de Bienestar. Las dictaduras sangrientas asesinaban y las conducciones económicas desindustrializaban, condenaban a la miseria a las poblaciones y se abría el mercado a las importaciones baratas. Algo que se fue reproduciendo a través del medio siglo transcurrido con mayor o menor intensidad, tratando de desmantelar el tejido social.
Si el primer gobierno de Donald Trump fue duro, este segundo mandato es mucho más, estando dispuesto a tomar en sus manos los recursos materiales, como está haciendo con el petróleo venezolano, cosa que hará con otros materiales estratégicos que requiera, razón por la que es tan importante en Argentina, que el Congreso apruebe la Ley de glaciares para poder explotar la minería de altura, como también la Reforma laboral para desmantelar cualquier resistencia obrera que se pueda presentar en el futuro.
Pero aquí abajo abajo/ cada uno en su escondite/ hay hombres y mujeres/ que saben a qué asirse/ aprovechando el sol/ y también los eclipses/ apartando lo inútil/ y usando lo que sirve/ con su fe veterana/ el sur también existe.
Y vaya si existe el sur... desesperado por deudas contraídas con un banco, un granadero de la Guardia Presidencial con sede en la Residencia de Olivos, perteneciente al escuadrón Chacabuco. Rodrigo Andrés Gómez se suicidó en servicio con el fusil FAL reglamentario, dejando cartas sobre su grave decisión. Era un joven de 21 años que se quitó la vida por mil dólares, mientras el presidente al que custodiaba, armaba una cena con el empresariado en la Fundación Faro cuya mesa estaba evaluada en 250 mil dólares, para celebrar la Reforma Laboral y el modelo pro empresa. Reforma laboral duramente criticada por los sectores afectados, lo que llevó este jueves 18 de diciembre a los trabajadores nucleados en la CGT y las dos CTA, además de muchos otros empleados públicos, del hospital Garrahan y de las Universidades Nacionales y otros más, a marchar a la Casa de Gobierno a las 3 de la tarde.
Un dato aportado por el editorial Día 727 del gobierno libertario del periodista Jorge Fontevecchia, a propósito del suicidio del soldado en Olivos: cada dos horas y cuatro minutos, se suicida una persona en Argentina, víctima de la angustia de no poder sobrevivir en estos horrendos momentos. Algo que debería preocupar al gobierno de Milei, sobre todo en momentos cercanos a las Fiestas navideñas.
Con su corno francés/ y su academia sueca/ su salsa americana/ y sus llaves inglesas/ con todos sus misiles/ y sus enciclopedias/ su guerra de galaxias/ y su saña opulenta/ con todos sus laureles/ el norte es el que ordena.
El apoyo brindado por el gobierno norteamericano en algún momento puede venirse abajo por las consecuencias sociales de su política económica. Cuestión por la que nuestro Javo deberá hacer buena letra y, por el momento con el masivo paro de los trabajadores y la negativa del Congreso sufrida ayer, sólo Patricia Bullrich ha intentado hacer bien los deberes yendo de su bancada a Casa Rosada varias veces intentando torcer las decisiones de los legisladores, cuestión que el revés recibido en la Casa de las Leyes, puede que le quite el sueño de ser candidata a presidenta para 2027. No obstante, puede que el ejemplo de Donald Trump de colocar placas bajo las fotografías de ex mandatarios norteamericanos con descripciones descalificadoras muy a su estilo de posteos, en el “Paseo de la fama presidencial” inspire al nuestro a hacer lo mismo en Casa Rosada.
Pero aquí abajo abajo/ cada uno en su escondite/ hay hombres y mujeres/ que saben a qué asirse/ aprovechando el sol/ y también los eclipses/ apartando lo inútil/ y usando lo que sirve/ con su fe veterana/ el sur también existe.
Con los ánimos caldeados, la gente en las calles y los precios en alza frente a un fin de año que recuerda al de hace más de dos décadas, con un presidente que tuvo que huir en helicóptero; con su natural indiferencia y su denodada fe en la apertura de los mercados, este sábado 20, Javier Milei partirá rumbo a Brasil a la reunión del Mercosur a los efectos de discutir el acuerdo con la Unión Europea, acuerdo que tiene problemas dentro de la Comunidad por la situación de los agricultores frente a sus pares latinoamericanos. El libertario quiere restarle protagonismo al dueño de casa, siendo que el presidente brasileño encabeza en estos momentos a la décima potencia económica mundial, pero el nuestro se lleva el premio a la mayor destrucción de un país en escasos dos años. Ya hizo un papelón en Noruega presentándose con un mameluco de YPF en los Nóbeles de la Paz y tuvo que volverse sin la foto con la venezolana premiada. Total... una mancha más qué le hace al tigre...
Con su corno francés y su academia sueca su salsa americana y sus llaves inglesas con todos sus misiles y sus enciclopedias su guerra de galaxias y su saña opulenta con todos sus laureles el norte es el que ordena.
Siempre en guardia y aturdidos por agresiones permanentes de todo tipo, en esta carrera de transformar a la población en esclavos sumisos de los ricos que manejan a la pintoresca marioneta que ocupa el poder, sobrevivir cada día se hace más penoso que algunos, como señalábamos, optaron por el suicidio como salida. Muerta la esperanza para ellos... ¿qué queda en el alma de los vivos? Queda mucho por defender, desde recuperar la dignidad perdida, sumida en las marañas de la mente que tejió la pandemia y el desengaño del gobierno progresista que llenó de odio y resentimiento a las mayorías que optaron por la pesadilla al mando, empieza a saborearse el desengaño. Muchos salieron a la calle a mostrar su descontento y decepción, que todo lo visto en estos días, amenaza derrumbar todos los amagos del gobierno libertario.
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