Se ha argumentado que una nueva constitución es necesaria para combatir la desigualdad. Un propósito loable y un instrumento equivocado. Las desigualdades tienen su sede en la estructura social, no en las normas legales.
Manuel Barrera Romero / Para Con Nuestra América
Desde Santiago de Chile
Otros países la tienen por largo tiempo (siglos) sin que se les ocurre tener una nueva. Tales son, por ejemplo, Estados Unidos cuya Constitución data del 15 de junio de 1780, Holanda de 1815, Noruega de 1814, Tonga de 1875, Australia de enero del 1901, Suiza de 1833. Por contraste, la República de Cuba ha tenido 5 constituciones. La última del 2018.
En los países sin constitución existe la supremacía parlamentaria y el imperio de la ley. Es decir, las leyes son la principal fuente del Derecho. Todos son iguales ante la ley y nadie está por sobre ella, incluyendo a los que están en el poder. Ninguna persona puede ser sancionada si no ha violado una ley.
Se ha argumentado que una nueva constitución es necesaria para combatir la desigualdad. Un propósito loable y un instrumento equivocado. Las desigualdades tienen su sede en la estructura social, no en las normas legales.
Por ello decir que una nueva constitución es un punto de inicio, como lo piensan muchos políticos es escribir en la arena al borde del Océano Pacífico, que de tal solo tiene el nombre.
Sin embargo, si en la situación actual del país ello ayuda a aminorar las tensiones estoy de acuerdo que todo el proceso de discusión de una nueva constitución debe utilizarse. Es el instrumento más adecuado del cual se dispone en la contingencia.
Los días 15 y 16 de mayo de 2021 se celebró una elección para seleccionar por la ciudadanía varios importantes cargos. Los 155 constituyentes, según una norma muy original para la historia del país. Para empezar: por vez primera se realizaba una elección en dos días seguidos, sábado y domingo.
Luego se elegían 155 constituyentes con dos normas especiales: igualdad de género y 17 representante de pueblos originarios.
Además se elegían Alcaldes y concejales para 346 comunas de todo el país.
Y desde el punto de vista político se elegían Gobernadores en 16 regiones. Los que acompañarían a los intendentes nombrados por el Presidente de la República. Curiosa dupla.
Según la ley si ninguno de los candidatos logra la mayoría necesaria en la primera vuelta electoral, compiten en un segunda vuelta las dos primeras mayoría. Ello ocurrió el 13 de Junio, siendo lo más importante desde el punto de vista político la selección de los Gobernadores:
Partido Demócrata Cristiano 4
Frente Amplio 2
Independientes 4
Ecologista Verde 1
Partido Socialista 2
En Santiago, que es la principal región del país por la cantidad de electores hubo una segunda vuelta entre una militante del Frente Amplio, Karina Oliva del Partido “Comunes”, no confundir con “Comunista”. Y Claudio Orrego del Parido Demócrata Cristiano, en lo que se ha dicho “la madre de todas la batallas”. Se impuso Orrego.
Una grata sorpresa nos entregó el Partido Verde Ecologista. Obtuvo una gobernación y 47 concejales.
Además entre los 155 constituyentes 81 están a favor del derecho al agua y 17 son activistas en defensa del medioambiente. Como dice la periodista Rosario Mendía en “La Tercera”: el nuevo panorama político se tiño del verde. En cuanto a la votación quintuplicaron los votos obtenidos en la última elección municipal. Pasaron de cuatro a 47 concejalías en todo el país. Además hay que considerar una variable importante sobre la cual hay parlamentarios que han reaccionado con premura, pidiendo una ley de voto obligatorio.
Se trata de la abstención electoral respecto del padrón en estas elecciones múltiples en primera y segunda vueltas se considera alta, aunque el Servicio Electoral (SERVEL) aún no tiene cifras oficiales (26 de junio de 2021).
La votación varía según los cargos que aparecían en la extensa cédula y según fuese la primera o la segunda vuelta. En la primera concurrieron más electores que en la segunda.
Los constituyentes recogieron 370.966 menos votos que los alcaldes.
En la segunda vuelta para Gobernadores regionales se calcula que votó el 19% del padrón. En la consulta inicial la abstención se calcula en un 45,56%.
Los independientes dentro o fuera de pacto, obtuvieron un 43% de los votos constituyentes y la mayoría de los alcaldes. En tanto que en concejales un 1,5%. Para estos puestos votaron alrededor de 115 mil electores más que para constituyentes. El “territorio” manda.
La derecha sufrió un dura derrota al obtener menos del 20% de constituyentes dado que en la redacción de la nueva constitución o “Carta Magna” el sector que tiene 20 o más de % puede vetar una propuesta.
En autoridades territoriales las fuerzas partidarias dominantes siguen siendo la centroizquierda y la derecha.
En cuanto a “La lista del pueblo” siendo un conglomerado de organizaciones populares es difícil caracterizarla desde el punto de vista político. Se supone que tendría una tendencia hacia el Frente Amplio, es decir la joven izquierda, y hacia los partidos comunistas y socialista. ¿Participaran en la Convención Constituyente como un grupo unido o se aglutinaran según los partidos que la constituyen? Nada se sabe al respecto por ahora.
En suma, dentro de la abundante abstención los independientes dentro y fuera de pacto obtuvieron el 43% de los votos para la Convención Constituyente y la mayoría de las Alcaldes. Votaron 115 mil electores más que para la Convención. En cuanto a las autoridades territoriales las fuerzas dominantes fueron la centro izquierda y la derecha. La primera suma 25,89% en gobernadores, 23,88% en alcaldes y 33,45% en concejales. La alianza de derecha denominada “Chile Vamos” obtuvo 19,4 % en gobernadores; 26% en votos para alcaldes, que constituye la primera mayoría en votos, y 30% en concejales.
Las fuerzas políticas por bloques son por orden se votos recibidos: La centro izquierda (ex-Concertación, que gobernó varias décadas después de la dictadura de Pinochet); la derecha (Chile Vamos, que ha gobernado dos periodos de cuatro años separados, según la constitución actual, ambos con Sebastian Piñera como Presidente. Los mismo ha sucedido con la Centro Izquierda, con Michele Bachelet. De modo que entre ambos suman 18 años en la Presidencia. ¡Qué gente de escasa imaginación!); el Partido Comunista, el Frente Amplio y la Federación Regionalista Verde Social, que en esta elección fueron separados.
Ningún candidato del Partido Comunista pasó a la segunda vuelta para la elección de gobernadores, a pesar de tener desde hace varios meses un candidato a la Presidencia, el alcalde Daniel Jadue. No por mucho madrugar amanece más temprano, solía decir mi abuelita.
La Convención Constituyente aún no se inaugura. Inicia su trabajo el 4 de julio 2021.
En la actualidad en el país se vive una gran incertidumbre. Nadie tiene seguridad acerca del futuro. Nuestro Presidente tiene una baja adhesión popular, de una cifra. Aunque inferior a ella es la adhesión del Parlamento y los partidos políticos. Naturalmente que el Sars-Cov-2 multiplica la incertidumbre de la población.
No obstante, los incansables políticos han empezado a seleccionar quiénes serán sus candidatos para las elecciones presidenciales este fin de año 2021. Además, deben hacer lo mismo con los candidatos a parlamentarios. Les deseo que tengan la sabiduría necesaria para elegir a quién enfrentará los desafíos del porvenir que nadie vaticina fácil. Una vez electos los candidatos que las distintas alianzas comenzará la contienda por la Presidencia. Electos los candidatos comenzará la campaña. Si en noviembre ningún candidato alcanza los votos necesarios, se realizará una nueva elección de diciembre entre las 2 primeras mayorías en diciembre. Ahí se sabrá quién se sacrificará para sacar al país del desempleo, del déficit en salud, en educación, en crecimiento económico. Deficiencias que nos ha regalado el molesto Covid-19, sin que nadie lo solicitara.
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