La derrota del criollismo y la clase corrupta
guatemalteca debe dar paso a la refundación profunda de la estructura política
y económica de nuestros país y esto solo puede ser posible, como dirá el Che,
cuando no solo tengamos organización, sino conciencia de que todo debe cambiar.
Kajkoj
Máximo Ba Tiul / Para Con Nuestra América
Desde San Cristóbal Verapáz, Guatemala
Para que el Estado
Criollo-Oligárquico guatemalteco sea totalmente derrotado, se necesita más que
masas soplando vuvuzelas o gritando, “fuera corruptos y que termine la
impunidad”, o mentes pensantes, que se
pasan la vida interpretando la realidad, pero sin ir más allá, los mismos que
critica Marx en la Tesis 11, al afirmar que “los filósofos no han hecho más que
interpretar de diversos modos el mundo, pero de lo que se trata es de
transformarlo”, o como en algún momento nuestro querido guerrillero y poeta
Otto René Castillo, llamara; “intelectuales apolíticos” o como los definimos en
algún momento como; “revolucionarios de salón” y que nuestro querido amigo
García Linera, les llama “revolucionarios de cafetín”.
Este criollismo fracasado, lo podemos hoy observar, en el cobarde,
corrupto, asesino y caudillo Alvaro Arzú, que con su prepotencia y con
envalentonada actitud, creyéndose dueño de la finca, a la que han despojado de
toda su dignidad durante muchos siglos, entra al edificio del Ministerio
Público, interrumpiendo la conferencia
de prensa en donde la Fiscal General y el comisionado de la CICIG, estaban
presentando la investigación que lo involucran como uno de los políticos más
corruptos de la historia reciente de nuestro país.
Arzú, inicia su carrera política al ser miembro de las
juventudes del Movimiento de Liberación Nacional, el partido de Mario Sandoval
Alarcon, líder de los grupos clandestinos paramilitares y de la política
anticomunista durante los gobiernos dictadores y militares. Su íntima amistad
con el “mico Sandoval”, le permite iniciarse como funcionario en el gobierno de
Romeo Lucas García, uno de los máximos genocidas de los últimos años en
Guatemala.
Por ser considerado miembro de unos de los linajes
históricos del país, siempre se le reconoció entre los oligarcas de “sangre
azul”, situación que lo coloca entre los miembros de la élite más
discriminadora y racista del país. Incluso cabe resaltar, lo que cuentan
algunos, “que cuando hizo campaña política para ser presidente, después de
cualquier mitin, llegaba a su casa a lavarse las manos con alcohol, para no
contaminarse con la mugre de la población indígena”.
Como cualquier político corrupto, siempre manipuló las
conciencias de la gente, que incluso le sirvió, que algunos grupos sociales, no
creyeran sobre el nivel de corrupto que es.
Arzú podríamos decir, que le abrió paso al neoliberalismo y el inicio de
la privatización de bienes del Estado, como: GUATEL, ENERGIA ELECTRICA,
FERROCARRIL, AGUA, CORREOS, entre otros.
Además de privilegiar a empresarios, dotándolos de leyes a su
favor. Aunque durante su gobierno se
firmó la paz, fue el gran impulsor de la derrota de la consulta popular de 1997
que reformaría la Constitución, para estar a la altura de los acuerdos de paz,
al considerarlo como el paso perfecto para que Guatemala, cayera en manos del
comunismo y a cambio promovió leyes de control social como la ley anticapuchas,
que es un paralelo a lo que hoy se pretende aprobar como la “ley
antiterrorista”.
Por eso no es extraño que después de haber presenciado el
informe de la CICIG-MP, ante las cámaras y grabadoras de los medios de
comunicación, argumente que esta persecución es “política y selectiva”,
promovido supuestamente por los grupos que nunca han podido llegar a gobernar y
que se le persigue por “haber ayudado Jimmy Morales, para opacar un supuesto
golpe de Estado”. Bajo este argumento,
confirma que es uno de los artífices del convenio entre élites políticas,
oligarcas y militares, para obstaculizar la investigación sobre corrupción e
impunidad.
Arengando ante los empleados municipales a una Guatemala
corrupta, al afirmar que la “CICIG supuestamente dijo, que todos los
guatemaltecos somos corruptos”, pensó que generaría una avalancha de
guatemaltecos a su favor y que saldrían a las calles a exigir la salida de la
CICIG, cuando en realidad, una mayor parte de la población guatemalteca están
en contra de la corrupción y la impunidad, porque se les considera como las
principales causas del deterioro humano de todos y todas.
Ante estas condiciones políticas que se viven en el país,
no está demás discutirlas y pensarlas alrededor de las reflexiones de un gran
revolucionario, el “Che”. Este 9 de
octubre se cumplieron 50 años de su asesinato en Bolivia, creyendo sus asesinos
que con eso, desaparecerían totalmente sus ideas, cuando fue al contrario,
porque mientras más muerto más presente está en las mentes y corazones de los
revolucionarios y de quienes quieren cambios profundos en el país.
El Che, como Marx, Gramsci, Mariátegui, y tantos más, que pensaron y
reflexionar sobre la forma de desterrar el colonialismo y la alienación en la
que nos mete el capitalismo, nos invitan a pasar hoy de la interpretación a la
acción. Nos invitan a construir el
hombre nuevo. “El “Che” Guevara
personificó a ese hombre nuevo, exigiéndose como ser humano, siendo
intransigente con sus principios. Su manera de promover sus ideas fue actuando
conforme a ellas, siendo ejemplo. En la guerrilla demostró valentía,
responsabilidad y disciplina, al tiempo que reflexionaba de modo teórico sobre
la práctica revolucionaria. Ante el triunfo de la revolución asume nuevas
responsabilidades como deber, se exige en su preparación intelectual, vive con
austeridad y predica con el ejemplo la igualdad. No pide para él y su familia
algún privilegio. Esta ética revolucionaria quedará inmortalizada en la frase
“si no hay café para todos, no hay café para nadie.” Impulsa y participa en las
jornadas de trabajo voluntario. Siguiendo su ideal de revolucionario y su
internacionalismo, decide luchar por la revolución en el Congo y en Bolivia,
dónde finalmente encontró la muerte”[1].
Entonces, la derrota del criollismo y la clase
corrupta guatemalteca debe dar paso a la refundación profunda de la estructura
política y económica de nuestros país y esto solo puede ser posible, como dirá
el Che, cuando no solo tengamos organización, sino conciencia de que todo debe
cambiar y por lo tanto, eso lo lograremos los hombres y mujeres nuevas de
nuestro país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario