Vivo en un país que, pese a la arremetida propagandística de la derecha mundial, tiene un gobierno que se ha conducido con eficiencia ante la pandemia. En el momento de escribir estas líneas, se han aplicado más de 9 millones de dosis de la vacuna (1.083 millones de personas con segunda dosis).
Carlos Figueroa Ibarra / Para Con Nuestra América
Desde Puebla, México
Después de que el coraje me bajó, me puse a pensar en que soy de los pocos seres privilegiados en que hasta ese momento han sido vacunados en el planeta. Vivo en un país que, pese a la arremetida propagandística de la derecha mundial, tiene un gobierno que se ha conducido con eficiencia ante la pandemia. En el momento de escribir estas líneas, se han aplicado más de 9 millones de dosis de la vacuna (1.083 millones de personas con segunda dosis). Desde mediados de 2020 se había llegado a los arreglos que explican la compra de 234 millones de dosis de cinco vacunas diferentes. Se calcula que a fines de abril la totalidad de adultos mayores estarán vacunados y a fines de 2021 lo estará la gran mayoría de la población.
No sucede así en otros lugares. La razón de ello estriba en la desigualdad que priva en el planeta. La información que he recabado me indica que hasta fines de marzo el 10% de los países del mundo (los países centrales y desarrollados) habían acaparado el 75% de las vacunas mientras que solamente el 0.1% habían sido asignadas a los países más pobres. Al finalizar marzo, 130 (67%) de los 195 países del planeta no habían recibido una sola dosis. Estados Unidos, Gran Bretaña y la Unión Europea se oponían a que países periféricos produjeran la vacuna. En los inicios del SARS-CoV 2, Andrés Manuel López Obrador presentó una iniciativa al pleno de la ONU para evitar que hubiese tal acaparamiento. La iniciativa fue aprobada por la inmensa mayoría de los integrantes de dicho organismo mundial. Poco menos de un año después, el propio presidente de México ha reconocido que tal resolución se convirtió en una simulación. Múltiples hechos de la pandemia han evidenciado la injusticia en la que vivimos. Así las cosas, en efecto me considero afortunado.
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