El neoliberalismo –en sus cuatro décadas de vida- cavó su propia tumba porque las propias contradicciones del capitalismo exacerbadas antes, lejos de ser resueltas con las políticas y estrategias de los políticos y sus economistas neoliberales, se transformaron en su demiurgo al ir desposeyendo de poder a los Estados para transferírselos a las grandes corporaciones…
Ernesto Wong Maestre / Para Con Nuestra América
Desde Caracas, Venezuela
En esa dinámica sociopolítica y económica fueron surgiendo los indicios de la debacle social a la que estaba llevando el depredador capitalismo cada vez más expansivo por todo el globo terráqueo y su espacio ultraterrestre. La humanidad comenzó a comprender su impotencia para resolver sus acuciantes problemas, y también que se incrementaban de forma tal que para fines del siglo XX las propias clases dominantes fueron perdiendo sus capacidades de dirección, y con la debacle social, política y económica in crescendo, el significado hegemónico de los imperios en la solución o incluso en la reducción de las intensidades de los conflictos nacionales, regionales o mundiales cada día va perdiendo todo su sentido y otros actores con diferentes conceptos políticos que irrumpen en el panorama mundial desde avanzado el pasado siglo comienzan a incrementar sus poderes, aun cuando los nuevos liberales intentan con expectativas ultraindividualistas y ejerciendo el poder militar y económico recomponer al imperio del capital, y por tratar de lograrlo, las contradicciones y sus tensiones se fueron expandiendo para conformarse un mundo unipolar, cada vez más rechazado por la mayoría de la humanidad ante una minoría derrochadora, ambiciosa y avariciosa.
2.- El neoliberalismo –en sus cuatro décadas de vida- cavó su propia tumba porque las propias contradicciones del capitalismo exacerbadas antes, lejos de ser resueltas con las políticas y estrategias de los políticos y sus economistas neoliberales, se transformaron en su demiurgo al ir desposeyendo de poder a los Estados para transferírselos a las grandes corporaciones, lo que ocasionó, por un lado, el incremento de la concentración y centralización del capital y las ganancias en cada vez menos actores mientras que por otra parte, al debilitarse los aparatos estatales de la democracia representativa, permitió empoderarse a sectores sociales de verdaderas capacidades de acción colectiva iniciándose así desde que ve la luz el siglo XXI el nacimiento de una nueva época, la cual viene configurándose gracias a la consolidación del poder y la praxis transformadora de esos sectores sociales emergentes y va configurando el nuevo tiempo en que los pueblos comienzan a echarle tierra al foso neoliberal y a prestarse para cerrarlo para siempre.
3.- El tránsito presencial/virtual al socialismo como praxis e imaginario en el siglo XXI es un proceso único como totalidad orgánica donde interaccionan cuatro grandes bloques históricos definidos por sus actitudes, praxis política mediadas por la acción del Estado, y por sus expresiones teóricas o manifestaciones del habla y el lenguaje principalmente por las dinámicas y diversas redes sociales, páginas web públicas y privadas, así como por los blogs personales o de agrupaciones privadas y públicas. Estos bloques sociopolíticos son: el conservador, el transformador, el indeciso y el indiferente o apático político. Cada uno de los tres bloques posee diferentes grados de integración y de ideologización como expresiones de las contradicciones y tensiones entre las clases sociales y por ello entre sus agrupaciones (partidos, movimientos sociales, asociaciones, fundaciones, instituciones) que se proponen representarlas y actúan en consecuencia, sea en las diferentes formas democráticas, como de forma autoritaria o anárquica también en todas sus manifestaciones posibles. Es un tránsito de época que, como todos por los que ha transitado la humanidad, es un cambio de poderes y también de ritmos políticos según los actores agrupados en bloques vayan perdiendo o incrementando sus capacidades de acción colectiva.
4.- El ritmo de ese tránsito de formación socioeconómica y política está condicionado significativamente por el nivel de reconocimiento que cada bloque y que cada uno de sus integrantes logre alcanzar de parte de sus coetáneos y contemporáneos del propio bloque y de o con los otros que también están en interacción dialéctica, ya que el no reconocimiento como multidimensionalidad expresiva -en tiempo y espacio- expresa contradicciones que ante condiciones objetivas y subjetivas precisas, generan diversas tensiones, las que marcan las pautas del ritmo de esos desarrollos y movimientos de transformación en la sociedad y en su Estado. Los ritmos de los procesos políticos y de sus teorías deben constituir objetos de estudios intensos debido a la necesidad que tienen esos sectores emergentes agrupados -y sus líderes- de poseer una mayor capacidad de entendimiento social acerca de los obstáculos objetivos y subjetivos para superar momentos rítmicos intensos o momentos tendientes al reflujo, sea por incomprensión o por ignorancia pues la realidad se transforma también en procesos estocásticos donde sus componentes casuales pueden en condiciones singulares alterar el ritmo político o económico y entonces aparentar algo que el bloque transformador no logra comprender en toda su totalidad concreta.
5.- Como la sociedad y el Estado que actúa y se sostiene en ella, forman parte integral del mundo –sobre todo a partir del primer proceso de globalización que generó la humanidad finalizando el siglo XV- entonces es necesario comprender que la mayoría de las sociedades y de los Estados están en permanente proceso de intercambios materiales, inmateriales y virtuales de saberes, o sujetos a imposiciones de poderes ajenos, dada la regular situación de desarrollo desigual socioeconómico capitalista que tiene cada país con gobiernos predominantemente conservadores o con gobiernos transformadores enfocados al socialismo que heredan estructuras capitalistas pero las va contrarrestando con nuevas u originales estructura comunitarias para constantemente crear espacios de posibilidades para las acciones viables del bloque transformador con fines socializantes y estabilizadores del tránsito hacia la formación socioeconómica socialista o comunalista.
6.- Los intercambios son tan disímiles que configuran una macrored global inserta dialécticamente en los dos tipos de globalizaciones en que la humanidad con su diversidad clasista y agrupacionista lleva a cabo su praxis transformadora o conservadora, indecisa o indiferente. Esos intercambios están mediados significativamente, tanto por los poderes de los cuatro bloques como por los de los poderes del entorno regional, continental o de peso mundial ya que en esta era digital, la ingeniería genética, biotecnologías, nanotecnologías y bioinformática como herramientas para alterar (beneficiar, perjudicar o neutralizar) el estado del desarrollo material y humano, cada vez más estarán siendo dominadas de distintas maneras -desequilibradas por ahora- por los cuatro bloques, aún cuando los dos más potentes y poderosos estén tratando de cooptar o captar a integrantes de los otros dos y ello presupone cierta bipolaridad a la hora de decidir los rumbos y estrategias del presente y del futuro.
7.- Por ello es que el tránsito de un tipo de Estado a otro no es un proceso sistémico y mucho menos exclusivamente objetivo, sino con cada vez mayor significados subjetivos, en que todos los subprocesos y componentes se desarrollan de forma aislada del resto del mundo, sino que la transformación actual de los Estados es un proceso estocástico en aumento de ritmo, con tendencias de regularidades totalizantes en que el desequilibrio de poderes como significado concreto y también la tendencia al equilibrio y a la estabilidad como significantes también concretos, obligan a las y los investigadores y líderes a tener que interpretar los tránsitos de un tipo de Estado a otro apoyados en las nuevas ciencias, tecnologías e innovaciones de avanzada para poder llevar a cabo sus praxis transformadoras.
8.- Tales praxis en toda su variedad que ocurre en los más de ciento noventa y cinco países del mundo están condicionadas por el cumplimiento o incumplimiento de los principios y normas del Derecho Internacional Público, también en transformación pero según sea el o los ejes de correlación de fuerzas ya que esta es triádica al igual que el poder como totalidad concreta en cada proceso estudiado, y si ese tipo de derecho es el que rige en la vida internacional de las Naciones debe interpretarse como la totalidad mediadora en la relación entre Estados y por ello reconocerse que el DIP ha sido abatido en sus principios y resquebrajado en sus normas por la parte de las potencias defensoras a capa y espada del depredador capitalismo y que lo aprobaron a regañadientes desde 1945 mediante la Carta de la ONU ante la fortaleza ética, política, militar y económica de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviética (URSS) que lo enriquecieron con propuestas independentistas y era la principal potencia enfocada a la construcción socialista y líder del Pacto de Varsovia, del Consejo de Ayuda Mutua Económica (CAME) y del campo socialista euroasiático-latinoamericano ya que Vietnam, Mongolia y Cuba también lo integraron junto a la URSS, Bulgaria, Alemania Democrática, Rumanía, Hungría, Checoslovaquia y Polonia. Y hoy junto a la República Popular China y toda la gama de aliados o de actores relacionados entre ellos, Rusia, India y Brasil se disponen a ir revelando un nuevo derecho internacional que sea no solo verdaderamente mediador en las relaciones entre Naciones sino también entre los actores privados y entre estos y los públicos
9.- Con los avances de las sociedades en la praxis comunalista durante el tránsito de formaciones socioeconómicas y políticas irá también avanzando contradictoriamente el proceso de extinción de los Estados y de la propia democracia como la forma más avanzada de ese, ya que también los cuatro bloques al tender a reducirse a dos y con un desequilibrio cada día más acuciante por el mayor peso que logrará tener el bloque transformador al propiciar más reconocimiento y motivaciones a los integrantes de los bloques de indecisos e indecisas y de indiferentes, ese se convertirá en un único protagonista de la historia humana y del cuidado y la protección esmerada de la naturaleza, clima y ambiente en general, ante la siempre posibilidad de contar en algún momento con información o presencia incluso de comunidades extraterrestres.
10.- La nueva época, con toda una macroestructura global de bloques de poder de significación nacional e internacional, con estructuras objetivas y subjetivas de variados significados respecto a los ritmos de sus procesos de transformaciones o de conservaciones para toda la humanidad, condiciona en sus actores sociales emancipadores la necesidad de ese particular saber, de ese especial modo de pensamiento que logre constante, sistemática y pertinentemente hacer suyo ese movimiento y desarrollo de esa totalidad orgánica y contradictoria como lo es la nueva época y los procesos objetivos y subjetivos que en ella se suceden debido a la praxis contradictoria de los cuatro bloques de poder y como expresión concreta del desarrollo o autopoiesis psicosocial y socioeconómica que la humanidad se propone si lo ve posible y se dispone a lograr si lo percibe pertinente, tal y como lo reconoció Carlos Marx en el momento cumbre de su integral pensamiento.
Por ello, en esta nueva época uno de los deberes de los integrantes del bloque transformador es dedicar más tiempo a su formación integral y propiciar colectivamente las condiciones para estudiar masivamente y comprender cada quien que es necesario el estudio de la filosofía de la emancipación y las teorías marxistas, recreadas por la rica diversidad de intelectuales orgánicos y líderes de pueblos con perspectivas y enfocadas o enfocados a construir revolucionariamente el socialismo, y que van surgiendo en este inicio de la nueva época venciendo obstáculos híbridos y bloqueos imperiales y neoliberales de todo tipo, en este mundo de hoy que con algunas pinceladas problémicas aquí se han esbozado como aportes a las líneas de investigación de nuestras universidades emancipadoras.
(*) Politólogo UH e Internacionalista ISRI, Magister en Ciencias Sociales FLACSO y Doctor en Seguridad de la Nación UMBV. Director del Centro de Estudios de Economía Política de la UBV. Analista político. Profesor universitario de sistema político, epistemología y teorías de las relaciones internacionales y del sistema mundo, derecho internacional público, procesos de integración, de seguridad y defensa, entre otras materias. Asesor de Tesis de Maestría y Doctorado. Correo:wongmaestre@gmail.com
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