Margarita Murillo no
concebía la lucha por un nuevo orden social como algo que se agotaba en lo
político-electoral. Su muerte se debió a esta trayectoria y por la última lucha
que encabezó: una recuperación de tierras hecha por la organización que presidía, la Asociativa
Campesinos de Producción Las Ventanas. Fue sorprendida y acribillada por
hombres encapuchados mientras se
encontraba laborando en una parcela en el municipio de Villanueva en Cortés.
Carlos
Figueroa Ibarra / Especial para Con Nuestra América
Desde Puebla, México
Margarita Murillo, dirigente campesina asesinada en Honduras. |
Conocí a Margarita
Murillo en ocasión de mi participación como conferencista magistral en el II
Congreso Nacional de Sociología en San
Pedro Sula, Honduras, en mayo de 2011.
Además de de esta actividad, me encontraba preparando el número 17 de la
revista Bajo el Volcán del Posgrado de
Sociología de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Indagué cuáles
luchadores políticos y
sociales podía yo entrevistar para que
dieran un testimonio sobre las luchas hondureñas de antes y después del golpe
de estado de junio de 2009. Y mis amigos y colegas hondureños Eugenio Sosa y
Marco Tinoco me orientaron. Me hablaron en particular de una mujer
excepcionalmente valiente y honesta, cuya voz era indispensable en la
revista, cuyo eje temático central sería
el golpe contra Mel Zelaya y la resistencia antigolpista. Por fortuna el
proyecto se logró y el lector o lectora puede acceder a la revista a través de
la red de revistas científicas Redalyc (http://www.redalyc.org/toc.oa?id=286&numero=25451).
Cuando tuve la fortuna
de conocer a Margarita era la coordinadora general del Frente Nacional de
Resistencia popular en el departamento de Cortés y también era parte de la Coordinación Nacional del mismo Frente. Posteriormente habría de ser
fundadora del partido LIBRE que encabeza el ex presidente Zelaya y además
candidata a diputada por dicho partido en el mismo departamento de Cortés. En el transcurso de la conversación pude
darme cuenta que Margarita tenía una larga trayectoria de lucha que arrancaba
desde las luchas sociales hondureñas de los años setenta y que había sido
sobreviviente de la resistencia revolucionaria contra la dictadura militar
hondureña en los años ochenta. Fue fundadora y dirigente de la Central Nacional
de Trabajadores del Campo y participó en
la solidaridad con la lucha revolucionaria nicaragüense. Por ese motivo fue
encarcelada y torturada. Su compañero de vida de aquel momento -Fredy Nolasco-,
fue comandante de las Fuerzas Populares Revolucionarias Lorenzo Zelaya y en ese cargo fue asesinado en marzo de
1987. En ese contexto salió al exilio y regresó en la década de los noventa
para nuevamente incorporarse a las luchas sociales y políticas. En el momento
del golpe contra Zelaya en junio del 2009, Margarita encabezó y organizó la resistencia en Cortés y particularmente en
San Pedro Sula. Su hijo Samuel fue secuestrado en esos días.
Margarita no concebía
la lucha por un nuevo orden social como algo que se agotaba en lo
político-electoral. La entrevista que le hice fue momentos antes de una actividad del Foro
Social del Valle de Sula, en el cual
ella participaba. Su muerte se debió a esta trayectoria y por la última lucha
que encabezó: una recuperación de tierras hecha por la organización que presidía, la Asociativa
Campesinos de Producción Las Ventanas. Fue sorprendida y acribillada por
hombres encapuchados mientras se
encontraba laborando en una parcela en el municipio de Villanueva en Cortés.
Como me ha escrito
Eugenio Sosa: “El movimiento popular y
el pueblo hondureño ha perdido a una de sus
mujeres más valiosas”. Juan Orlando Hernández debe responder por este
crimen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario