Los hechos de estos
días muestran a una derecha envalentonada porque la pillaron con las manos en
la masa. Este sábado 22 de octubre el Tribunal Penal venezolano del Estado de
Trujillo suspendió la recolección del 20 por ciento de las firmas para el
revocatorio presidencial que impulsa la derecha debido a irregularidades en las
firmas de la primera etapa.
Ángel Bravo /
Especial para Con Nuestra América
Telesur es el único medio de comunicación que cuando informa,
lo hace respetando, que en Venezuela hay un gobierno legítimo con un Estado de
Derecho. La perspectiva del resto de los medios al servicio de las oligarquías
latinoamericanas encabezados por CNN, “informan” justificando la necesidad de
un golpe de Estado; para ellos Venezuela es un caos, no hay gobierno, no se
respetan las libertades y abogan por la intervención del amo del mundo, para
devolver la democracia.
El imperio desde hace varios años está dedicado a recuperar
su hegemonía en América del Sur, y para eso, cual águila, enfocó su mirada en
los países estratégicos por las riquezas que poseen, se trata de los tres
grandes, conocidos como las “locomotaras del Sur”. Ya lograron colocar en
Argentina a su nuevo peón Mauricio Macri, un aprendiz de dictador y en Brasil a
Michel Temer, un traidor a carta cabal. Les queda Venezuela y a eso están
dedicados en estos días. Todo indica que Barack Obama quiere, a cómo dé lugar,
antes de dejar su mandato, tener recuperado el patio trasero completo; así le
ahorra el trabajo al nuevo inquilino/a de la Casa Blanca y de una vez complace
a la oligarquía venezolana.
Si en la patria de Simón Bolívar no hubiera petróleo, los
Estados Unidos trataría a Venezuela como trata hoy a Haití: con completa
indiferencia. Que haya democracia o que haya dictadura en un país, eso es lo
que menos le interesa a los Estados Unidos; lo que le importa es que quien sea
el que gobierne un país esté a su servicio. El problema que tiene en Venezuela
es que se enfrenta a un gobierno democrático, que es el resultado del voto
popular. Y es un país que decidió desde que estuvo Hugo Chávez, que las
riquezas sean redistribuidas y no zaqueadas por las grandes transnacionales. A
eso se agrega que el gobierno de Nicolás Maduro cuenta con un gran respaldo
popular y además tiene el apoyo firme de las Fuerzas Armadas. Por eso es bien
difícil que se repita las recetas aplicadas en Chile, Honduras o Paraguay. El
imperio sabe muy bien que en Venezuela Hugo Chávez constituyó unas Fuerzas
Armadas leales, al servicio de la Revolución Bolivariana.
Los hechos de estos días muestran a una derecha envalentonada
porque la pillaron con las manos en la masa. Este sábado 22 de octubre el
Tribunal Penal venezolano del Estado de Trujillo suspendió la recolección del
20 por ciento de las firmas para el revocatorio presidencial que impulsa la
derecha debido a irregularidades en las firmas de la primera etapa. De esta
forma Trujillo se sumó a los Estados Aragua, Bolívar, Carabobo, Monagas, Apure
y Zulia, cuyos tribunales penales también anularon el uno por ciento de las
rubricas de la primera fase por el fraude cometido en la recolección.
Las irregularidades presentadas son graves. El CNE informó
con exactitud, que de un millón 957 mil 779 rúbricas introducidas por la Mesa
de la unidad Democrática, unas 605 mil 727 no cumplieron con los criterios
establecidos por la norma.
De ellas, 307 mil 747 no cumplieron con uno o más criterios y
que 97 mil 158 planillas solo contenían datos en un campo: 86 mil 337 solo
tenían el nombre y el apellido, 80 mil 105 solo la huella del elector, 18 mil
338 solo el ciudadano a revocar, 7 mil 823 solo el cargo a revocar, mil 805
solo la firma y 396 solo la cédula del elector. Entre las irregularidades
también había firmas de personas que ya han fallecido, de estos casos hubo 10
mil 995.
Debido a todo eso el Consejo Nacional Electoral (CNE) decidió
posponer el proceso de referendo revocatorio presidencial en Venezuela.
Por eso la oposición venezolana que es mayoría parlamentaria,
declaró este domingo 23, una "ruptura del orden constitucional". O
sea, además de hacer fraude quieren dar un golpe de Estado, y cuentan con el
apoyo de Washington y de todos los medios adheridos a la Sociedad
Interamericana de Prensa (SIP), por eso no informan de todas estas
irregularidades.
La oligarquía es descarada, no entiende que esta es una lucha
por la soberanía de Venezuela. ¿Qué creían que nadie iba a revisar esas firmas?
La derecha no tiene ningún tipo de pudor, ni siquiera respeta la memoria de
quienes ya no viven.
Si continúan haciendo votar a los muertos, entonces Venezuela
tendrá Nicolás Maduro por muchos años más.
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